El frío no pudo con la fiesta en la plaza del Pilar

Miles de personas siguieron las campanadas de fin de año desde la plaza del Pilar de Zaragoza, como ya es tradicional. El mayor cotillón de la capital aragonesa, la gran fiesta popular para despedir el 2016, volvió a tener su epicentro en la plaza del Pilar de Zaragoza.

A partir de las 23.15 horas, los trabajadores municipales comenzaron el reparto de más de 60.000 uvas y 5.000 bolsas de cotillón.

Después, el reparto fue amenizado con la música de la orquesta La Jungla desde el escenario de la Fuente de Goya, donde sonó la música hasta poco antes de las campanadas.

Tras las doce campanadas que marcó el reloj del Ayuntamiento y que dieron la bienvenida al nuevo año, tuvo lugar un espectáculo pirotécnico, el disparo desde la cubierta del Ayuntamiento y el encendido del balcón del consistorio.

Con los fuegos artificiales volvió la música de la orquesta, marcando el ritmo con el que comenzó el nuevo año. La fiesta se prolongó hasta las 2.30 horas.