Utebo invierte más de 130.000 € en el ropero para familias con pocos recursos

Utebo ha invertido más de 130.000 euros en el ropero para familias con pocos recursos. Una veintena de voluntarios se encargan de este servicio, que ahora se ubica en el edificio polifuncional, que cada mes atiende a un centenar de usuarios (entre adultos y niños) con dificultades económicas.

"Se trata de dar calidad a un servicio que se ha consolidado con los años y dejarlo en la situación que se merece", dijo el alcalde de Utebo, el socialista Miguel Dalmau. La actuación, que ha costado 131.870,65 euros, ha sido financiada íntegramente gracias a una ayuda de la Diputación Provincial de Zaragoza.

"No tienen que ser familias marginales, sino que también se atiende a gente con dificultades puntuales", explicó la concejala de Servicios Sociales, Rosa Magallón (IU). También lo utilizan los usuarios del albergue. Esta explicó que hay 12 voluntarios para adultos y 10 para niños, casi todos mujeres, que se encargan de atender el servicio: seleccionan la ropa, la lavan, la planchan y la distribuyen. "Está previsto combinar el potencial de voluntariado con un nuevo proyecto de inserción, haciendo posible la inclusión a personas en desempleo de difícil empleabilidad o situación de discapacidad", añadieron desde Servicios Sociales.

Para poder usar el ropero tienen que pasar primero por los servicios sociales. Magallón dijo que la ropa que no puede utilizarse porque está en mal estado se deriva para reciclarla en la entidad Arropa2. "Hace unos ocho años que empezó a funcionar el ropero y ahora la demanda está estabilizada", añadió la edil de Servicios Sociales.

Los usuarios son de Utebo, pero también atienden necesidades especiales de sitios próximos, como los barrios zaragozanos de Casetas o Garrapinillos. La ropa usada se recoge en distintos edificios municipales gracias a la solidaridad de los vecinos de Utebo.

Según informaron desde el Ayuntamiento, la superficie total útil del ropero es de 317,81 metros cuadrados. Este espacio se distribuye en una sala de reuniones con acceso independiente al resto de espacios de servicios sociales, una zona de espera y recepción de material. También hay una zona de lavado, aneja al espacio de aseos, así como otra de almacenaje, donde están instaladas las estanterías de almacenaje.