Para hacerse con una bicicleta fabricada en los Países Bajos no es necesario frotar una lámpara y pedir un deseo. O tal vez sí. En la capital aragonesa, existen varias tiendas de bicicletas que ofrecen este tipo de vehículos de dos ruedas inspirados en los que originalmente se producen en Holanda. Algunos de estos comercios los importan para su venta, tanto nuevos como usados. Pero lo más difícil de imaginar, hasta ahora, era encontrar bicicletas holandesas en una tienda de iluminación de Zaragoza.

Gracias a la amistad que Ana y Erik tienen con Bruno, del establecimiento de lámparas Keluz, el local luce en su escaparate una de las bicis que esta pareja formada por una valenciana y un holandés venden a través de su tienda virtual de bicicletas importadas desde la ciudad de Róterdam.

“El verano pasado comenzamos esta iniciativa a través de nuestra web. Intentamos ajustar el precio con nuestro proveedor en Róterdam para ofrecer al público bicicletas con un coste que no sea excesivamente elevado”, explica Ana. Hacerse con una de sus bicis cuesta, según modelos, entre 200 y 500 euros aproximadamente, incluido IVA y transporte, a toda España, con un pequeño recargo si se trata de Canarias.

Las bicicletas holandesas, sobre todo los modelos clásicos, se caracterizan por “su comodidad, la posición de conducción es más erguido, con la espalda recta, ves y te ven mejor, son más robustas, la cadena va cubierta del todo, no tiene piñones, las marchas están en el buje y los frenos de algunos de estos modelos son de contrapedal -se accionan al pedalear hacia atrás- y suelen ser de tambor, más resistentes al polvo y la humedad”, explica.

“Queremos contribuir al cambio en la movilidad urbana, promoviendo el uso de la bicicleta como medio de transporte cómodo, eficaz, limpio, saludable y sostenible. Por eso traemos las bicis de uno de los países ejemplo en el uso del ciclismo urbano”, cuentan en su web Ana y Erik.

En la capital aragonesa, el uso de este tipo de vehículos de dos ruedas está cada vez más extendido y las tiendas especializadas cuentan con diferentes modelos de bicicletas en función de la demanda.

Actualmente, en el establecimiento de Recicleta no disponen de bicis holandesas aunque "en otras temporadas hemos vendido bastante bien marcas como Azor e incluso bicicletas de segunda mano traídas directamente desde Róterdam. Pero en la actualidad estamos trabajando principalmente marcas alemanas y alguna marca urbana que ofrece modelos de corte clásico. Hemos tenido bastante oferta en tiempos y las conocemos bien, pero actualmente las tendencias van por otro lado, incluso en el mercado europeo”, opina David Arribas, uno de los responsables de Recicleta.

Urbanas, de tipo holandés, clásicas o 100% holandesas, la pasión ciclista en Zaragoza sigue avanzando y sorteando obstáculos para lograr que la convivencia entre coches, bicis y peatones se equipare a la existente desde hace décadas en diferentes ciudades holandesas.