El juez ratifica la sanción de 3.000 euros al promotor de una protesta que acabó en disturbios
La Delegación del Gobierno multó al joven que comunicó una concentración en 2014 en favor del barrio de Gamonal.
Un juez acaba de confirmar la multa de 3.000 euros que el delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, impuso a Gorka D. A. como responsable último de los altercados que se produjeron el 17 de enero de 2014 en Zaragoza, durante una concentración que había sido convocada en apoyo del barrio burgalés de Gamonal. El acto debería haber consistido en una concentración ante el Paraninfo de la Universidad, pero se transformó en una manifestación que terminó con disturbios en el barrio de La Magdalena y especialmente en San Vicente de Paúl.
Los incidentes se saldaron con cuatro detenidos y cinco policías heridos leves por las contusiones que les produjo el lanzamiento de botellas, piedras y otros objetos. Además, fueron incendiados tres contenedores, un turismo resultó dañado a causa del fuego y varias señales de tráfico y un semáforo acabaron en el suelo.
Gustavo Alcalde, responsabilizó de todos estos hechos a Gorka D. A., por ser la persona que había comunicado a la Delegación del Gobierno que se iba celebrar una concentración frente al Paraninfo. Como el acto, sin solución de continuidad derivó, según la Policía, en una manifestación por las calles de la ciudad y en una serie de desórdenes con daños en bienes públicos y privados, la delegación consideró que el responsable de los mismos era el promotor de la reunión "por no haber tomado las medidas oportunas" para que se desarrollara sin incidentes.
El joven recurrió la sanción y, ahora, el titular del Juzgado Contencioso-Administrativo número 3 de Zaragoza, no solo la ha confirmado sino que le ha condenado a pagar 400 euros más en concepto de costas. El magistrado recoge en su sentencia que la ley indica que los organizadores de este tipo de actos deben adoptar medidas para que se celebren de forma adecuada. Añade que, en este caso, "no consta que Gorka D. A. hiciera nada para evitar que la concentración se convirtiera en una manifestación, ni los desórdenes posteriores". El juez señala que es cierto que se aportó una grabación de "muy corta" duración en la que se escucha por un megáfono que "la concentración queda desconvocada" y se añade:"A partir de ahora... allá cada cual". Para el magistrado, se trata de una medida "insuficiente" y "meramente testimonial", que no fija de forma "mínimamente seria" el final de la misma.
En cuanto a la multa, el juez recuerda que para las infracciones graves la horquilla va de 300 a 30.050 euros, y la fija en 3.000, de acuerdo con el principio de proporcionalidad y la "gravedad de la conducta desplegada", dados los daños en bienes públicos y privados que se produjeron.
