'Complicidad', la escultura que lleva camino de tres lustros decorando la Gran Vía zaragozana, tardará un tiempo en recuperar su forma original después de que unos operarios la atropellaran accidentalmente a las 3.00 de este lunes, cuando acometían la tala de varios árboles del bulevar.

El accidente dejó la obra, que originalmente mostraba a tres mujeres de extrema delgadez asidas entre sí y formando un círculo humano, sin una de las protagonistas, de la que solo quedan los pies. Además, otra de las muchachas ha perdido el brazo izquierdo casi completo.

El autor de la obra, Alberto Gómez Ascaso, acudió a primera hora al lugar del suceso, a la altura del número 24 del paseo -donde se colocó tras la reforma integral de la calle-. Ahí presenció las labores de rescate de los pedazos e hizo una primera valoración de los daños.

El área de Patrimonio del Ayuntamiento barajaba en un primer momento que la restauración se hiciese sobre el terreno, en la propia Gran Vía, aunque el creador considera más oportuno llevar la intervención a un lugar de trabajo más propicio: "Lo ideal es que la llevemos a la fundición Torres, en San Juan de Mozarrifar, con la que suelo trabajar. El trabajo que hay que acometer es complejo, hay que quitar la escultura y rehacerla entera, rearmarla, y eso resultará más fácil en un lugar preparado para ello".

El proceso de restauración obliga a "manejar la temperatura de toda la escultura a la vez, ya que el bronce es muy buen conductor y por ello es preciso utilizar varios sopletes a la vez", asegura Gómez Ascaso. 

Pese a lo desafortunado del percance, 'Complicidad' ha gozado de cierta suerte. Al menos eso afirma el autor: "Por fortuna, el impacto la ha roto por las soldaduras y no la ha deformado". Aunque el atropello también ha provocado "media docena de grietas importantes en las que habrá que meter la radial y soldar".

La escultura está encastrada en una base de hormigón recubierta de adoquines que, según apunta el escultor, habrá que "romper".