Ante el caos que provoca la huelga de trabajadores, muchos usuarios del autobús han pasado a buscarse la vida de otra manera para moverse por la ciudad. Los datos son esclarecedores: el pasado mes de diciembre, que tuvo 21 días de huelga, se registró una caída de casi el 15%. Aún no hay datos de enero, pero todo hace indicar que la tendencia será similar.

Si en diciembre de 2014 se subieron al autobús 7.867.772 personas, en el de 2015 lo hicieron 6.697.519. Se trata de un descenso tan notable que no puede achacarse a factores coyunturales, como el tiempo o la fecha concreta de los festivos en Navidad. De hecho, los datos suponen una ruptura total con la tendencia al alza que llevaba el uso del autobús urbano del año pasado. En 2015 hubo más usuarios que en 2014 en ocho de los doce meses del año. De los cuatro en los que hubo peores registros (enero, agosto, septiembre y diciembre), en todos ellos fueron leves caídas salvo en el caso de diciembre, el mes en el que comenzó la huelga.

De hecho, esta bajada ha lastrado el balance total anual del autobús urbano. Durante el año pasado los vehículos de Auzsa llevaron a 87.993.125 usuarios, cuando en 2014 fueron 88.377.744. Una bajada de más de 400.000 viajeros que, de no ser por la huelga del autobús, hubiera sido una subida de más de medio millón.

Si hay un número significativo de usuarios que ha renunciado a usar el autobús, cansados de esperar en las paradas, la pregunta es cómo hacen ahora sus desplazamientos por la ciudad. Aunque haya podido registrar un ligero repunte, el tranvía no es una solución para la mayoría, ya que solo da servicio a una parte limitada de Zaragoza. Por otro lado, desde el Ayuntamiento apuntan que los medidores de aforos de tráfico revelan que no ha habido un número reseñable de zaragozanos que haya optado por el vehículo particular como solución. Los taxistas admiten que han aumentado su volumen de negocio durante la huelga, pero más durante los primeros días que ahora. Su precio hace que no sea un transporte alternativo para la práctica totalidad de los usuarios del bus.

Otra posible solución es la bicicleta. Aunque no hay datos concretos, desde el Consistorio señalan que el servicio de alquiler Bizi tampoco parece que haya disparado sus usos. Así pues, la bicicleta privada y los paseos a pie se antojan como las principales soluciones que han elegido los zaragozanos para sortear el deficitario servicio que provoca la huelga del autobús. Hay que recordar que los servicios mínimos que estableció el Ayuntamiento, del 33%, hacen que se queden en cocheras dos de cada tres vehículos entre las 9.00 y las 11.30, y entre las 18.00 y las 20.30. A estos horarios hay que sumar la media hora de antes y la media de después, en las que los autobuses acuden o salen de cocheras para cumplir allí las horas de huelga.Los datos del tranvía

El tranvía, por su parte, ganó usuarios durante el año pasado con respecto a 2014. En 2015 fueron 27.578.757 el número de validaciones que registraron los Urbos 3, unas 700.000 más que durante el curso anterior. Sin embargo, esta cifra volvió a quedarse lejos de las previsiones que marca el plan económico-financiero que redactó la sociedad Los Tranvías de Zaragoza. En este documento se estimaba que en 2015 usarían el tranvía 31.717.594 usuarios, más de cuatro millones más de los que han acabado subiendo. Se trata de un déficit de demanda similar al que se registró el año pasado.

A los datos de autobuses urbanos y del tranvía hay que sumar los casi 4 millones de usuarios que –en este caso de manera estable con respecto a años anteriores–, hicieron uso de las líneas de bus que unen los barrios rurales con el centro de Zaragoza, lo que deja la cifra total de usuarios del transporte público en 2015 en 119,5 millones de usuarios.