El Ayuntamiento de Zaragoza ha abierto un expediente sancionador a FCC por tener varios vehículos de limpieza aparcados y parados junto a la tapia de sus instalaciones de la carretera de Castellón, cuando debían estar prestando servicio. La empresa ha presentado alegaciones y justifica los hechos diciendo que algún trabajador había quedado "a tomar un café" en un restaurante cercano, y que los vehículos estuvieron un breve periodo de tiempo aparcados en ese lugar.

Fuentes conocedoras del funcionamiento de la empresa denuncian que hasta hace unos meses era una práctica "relativamente habitual" que se sacaran vehículos a la calle y se quedaran aparcados junto a las instalaciones. A la salida del recinto, los inspectores municipales comprueban cuántas unidades salen, para luego proceder al pago a FCC por cada vehículo. Sin embargo, según las fuentes consultadas, en momentos o días puntuales –con bajas laborales de última hora, por ejemplo–, los camiones o barredoras se sacaban y se dejaban fuera, sin prestar por lo tanto el servicio comprometido.

Las citadas fuentes admiten, sin embargo, que estas prácticas han desaparecido en los últimos meses, en parte porque la mayoría de los vehículos llevan GPS –por lo que el supuesto fraude sería fácilmente detectable– y en parte porque se ha producido un aumento de la inspección de esta y otras contratas por parte del Ayuntamiento. Sin embargo, el área de Servicios Públicos ha detectado dos supuestos incumplimientos cometidos el pasado 12 de noviembre, y ha abierto un expediente sancionador que puede derivar en una multa para la empresa.

En el informe municipal se refleja que ese día los inspectores vieron tres vehículos de la contrata de limpieza pública "estacionados junto a la tapia de las instalaciones de FCC". Dos de ellos salieron de forma consecutiva (a las 14.06 y 14.07, según el inspector), mientras que otro lo hizo algo más tarde, a las 14.30. Este último lo conducía "sin lugar a dudas" la "misma persona que a las 14.07 había sacado la barredora", algo que no permite el pliego de condiciones. Poco antes de las 15.00, el inspector comprobó que los tres vehículos seguían aparcados en ese punto. Media hora más tarde, sin embargo, su compañero del turno de tarde observó que solo uno de ellos permanecía junto a la tapia.

En sus alegaciones, FCC admite que durante un rato los vehículos estuvieron estacionados, aunque dice que la parada respondió a alguien que quedó "a tomar un café con unos compañeros en el restaurante Los Faraones" –ubicado al otro lado de la carretera de Castellón–. El instructor del expediente refleja que el establecimiento "dista a pie unos 500 metros" del lugar donde estaban parados los vehículos, y que hay que "cruzar la N-232 por un paso elevado", cuando "dicho local dispone de suficiente espacio para aparcar alrededor".

En conclusión, el servicio de Limpieza Pública cree que hay "indicios suficientes" para elevar una "doble propuesta de penalización". La primera por "la permanencia de vehículos sin conductor mientras tendrían que estar prestando el servicio de limpieza", y la segunda porque "un mismo conductor sacara de las instalaciones para prestar servicio dos vehículos diferentes".

Además, también se ha iniciado la tramitación de otra posible sanción, en este caso porque un vehículo de FCC, pero ajeno a la contrata, fue reparado dentro de las instalaciones de la carretera de Castellón, donde solo pueden entrar los vehículos que prestan los servicios en Zaragoza.

"Las empresas deben cumplir"

El concejal de Servicios Públicos, Alberto Cubero, exigió a la empresa "que cumpla con sus obligaciones". "El Gobierno está haciendo un esfuerzo por pagar, pero a cambio las empresas también deben cumplir", apuntó. Además, reclamó a FCC que permita a los trabajadores concentrar sus vacaciones en los meses de verano, y no obligarles a repartirlas a lo largo de todo el año. La empresa, por su parte, no quiso hacer ningún comentario sobre los expedientes sancionadores abiertos por el Ayuntamiento.