Una nueva cara para el Huerva

Antes de que acabe el año se adjudicarán los trabajos de mejora de la zona, financiados con los fondos Life+ de la Unión Europea.

Una imagen del río Huerva a su paso por Camino de las Torres.
Una imagen del río Huerva a su paso por Camino de las Torres.
Sandra Lario

El proyecto para mejorar el entorno de la desembocadura del río Huerva es un hecho. El Ayuntamiento de Zaragoza adjudicará antes de que acabe este año los trabajos de mejora de esta zona de la ciudad. La actuación urbanística cuenta con un presupuesto de 156.000 euros (IVA incluido) que se cargará a los fondos Life+ de la Unión Europea. El objetivo es mejorar “la conectividad azul” entre la margen derecha del parque Bruil y el parque Lineal del Huerva en ambas márgenes.


La memoria del proyecto ya se ha elaborado y puede consultarse en la web del Consistorio. A lo largo de más de un centenar de páginas se detallan todos los aspectos de la actuación. El documento comienza recordando el espacio único que fue el parque Bruil en el siglo XIX (en él, junto a árboles singulares y flores de todo tipo, habitaban faisanes y ciervos) y que tras ser expropiado ya en el siglo XX por el Ayuntamiento, toda esa riqueza natural se fue perdiendo.


El objetivo ahora es “mejorar la integración del río Huerva en los parques y con ellos en el casco urbano”. El conjunto del parque Bruil y parque Lineal tiene una superficie de casi 33.500 m2 de los que 28.870 son césped con grandes árboles. “El parque ofrece un estado general aceptable pero susceptible de mejoras que lo harían mucho más interesante y atractivo sin inversiones cuantiosas”, se explicita en el informe.


Con el paso del tiempo, vecinos y paseantes han generado “zonas de paso en taludes y jardines no destinados a ese uso” y los técnicos municipales encargados del proyecto consideran necesario “regularizar alguna de estas nuevas vías, dotándolas de los acabados necesarios para su uso”.


La actuación en la zona pivota en torno a tres puntos: establecer un acceso al Huerva desde el parque Bruil, colocar una escalera de acceso al río desde el Camino de las Torres y reformar el vallado que hay en las márgenes del río.


El acceso desde el parque Bruil se ubicará entre la pasarela de la calle de Mariano Alvira Lasierra y la levantada en el entorno del CDM Alberto Maestro. “En el ámbito de esta actuación se eliminarán los vallados y se instalará una escalera de acceso a una pequeña plataforma, donde el ciudadano pueda disfrutar del entorno del río”. Esta actuación permitirá salvaguardar los árboles de gran porte, eliminar especies invasoras y trasplantar los de carácter ornamental. Se evitarán las intervenciones a base de hormigón y se emplearán especies autóctonas locales en la revegetación del terreno.


La escalera que salvará el desnivel entre Camino de las Torres y el camino de la margen derecha del Huerva se construirá junto a la pasarela ubicada en el entorno del Alberto Maestro, donde ya se ha generado una zona de paso, según el Ayuntamiento. Esta escalera será en forma de 'V', ubicando entre los dos ramales del extremo superior unas terrazas ajardinadas.


En lo que respecta al vallado, este se reformará en la margen derecha desde el parque de Villafeliche hasta la desembocadura del Huerva y en la margen izquierda desde la calle de Mariano Alvira Lasierra hasta el Ebro. Según el Ayuntamiento, se sustituirá la malla existente por arbustos de especies autóctonas. Se pretende que estos actúen “como barrera disuasoria, sin entorpecer la visión del cauce del río y fomentando en lo posible la naturalización del entorno”.


Según consta en el informe municipal, los trabajos “redundarán en un beneficio a todos los usuarios del entorno, haciendo que el lugar sea más atractivo y cómodo, potenciando de esta manera su uso diario”.

Los vecinos, contentos pero reticentes

David Arribas, presidente de la asociación de vecinos del barrio de La Madalena, explica que hace meses que el Ayuntamiento trabaja en este proyecto, cuyos detalles se han consensuado con los vecinos. “La intervención recuperará el río, lo hará más visible y lo acercará a la ciudadanía”, apunta Arribas, quien sin embargo ha señalado que parte del colectivo vecinal se ha mostrado muy reticente al proyecto por el impacto que este pueda causar en el parque Bruil.


“Este proyecto ha tenido muy buena acogida pero en parte nos ha aterrorizado porque la reforma que se hizo en el parque en 2010 nos dejó un escenario de guerra, un arboricidio, y no queremos que eso se repita”, añade el representante de los vecinos, que espera que la empresa que resulte adjudicataria de las obras “sea absolutamente respetuosa” y les ofrezca todas las garantías de conservación de esta zona verde de la ciudad.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión