ZeC se queda solo y tendrá que gobernar con unas ordenanzas aprobadas por la oposición
PP, PSOE y Ciudadanos impiden que Zaragoza en Común pueda aprobar su propuesta de IBI e IAE.
Zaragoza en Común volvió a quedarse solo este lunes en la votación de sus primeras ordenanzas fiscales al frente del Ayuntamiento de Zaragoza. El PSOE ratificó su posición junto a PP y Ciudadanos y este voto conjunto de las tres formaciones municipales impidió a ZeC sacar adelante su propuesta para los impuestos del IBI y del IAE.
Finalmente se aprobó una bajada del tipo del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de uso residencial en un 21,7%, mientras que no variará en el resto de usos.
La propuesta de ZeC de gravar más a comercios y oficinas a partir de un umbral de 750.000 euros de valor catastral -anteriormente la habían fijado en 230.000 y, posteriormente, en 500.000 euros- no salió adelante, por lo que se mantendrá el umbral en el millón de euros.
Tras semanas de negociaciones, ZeC no ha logrado modificar la posición del PSOE. El consejero municipal Fernando Rivarés y el concejal del grupo municipal del PSOE Javier Trivez escenificaron este lunes su falta de sintonía.
Tampoco tuvo ZeC el apoyo suficiente para aprobar su propuesta de incremento del Impuesto de Actividades Económicas (IAE). Trívez defendió la bonificación por inicio de actividad, frente a la supresión que proponía ZeC y a la que se ha opuesto el resto de la corporación, y por creación de empleo.
Finalmente salió adelante con una enmienda de CHA para bonificar el empleo de calidad. En dicha enmienda, que fue apoyada por PSOE y Ciudadanos y ha contado con la abstención del Grupo Popular, se establece que los contratos sean como mínimo a media jornada, con una duración efectiva de más de cinco años o que las empresas beneficiarias no estén involucradas en procedimientos de regulación de empleo o hayan efectuado despidos improcedentes.
PP y PSOE tumbaron también la idea de modificar el callejero fiscal de Puerto Venecia, como quería Zaragoza en Común, que pretendía elevar la categoría fiscal de Puerto Venecia, ya que paga "la mitad" que Avenida América, Avenida Madrid, Avenida San José o Jorge Cocci, según Rivarés.Tensión entre PSOE y ZeC
El rifirrafe entre los representantes de ZeC y PSOE fue constante durante todo el Pleno, ya que Rivarés criticó que los socialistas no defiendan la misma idea que sus compañeros a nivel autonómico o que su líder nacional, Pedro Sánchez, lo que le genera una sensación de "grupo minoritario con un poco de ira" o de que pretenden "bloquear" al Gobierno.
Lamentó que por una "extraña alianza" entre PP y PSOE se impide al consistorio recaudar más para hacer frente a la "enorme" deuda, gestionar unos servicios públicos "infradotados" y hacer política para "la mayoría", y ha alertado que estas ordenanzas fiscales van a suponer "recortes e impagos".
Trívez, por su parte, denunció la actitud "intolerante, obstruccionista y cerril" de ZeC, a quienes ha animado a ponerse "las pilas" para aprobar los presupuestos, que están "dispuestos a negociar", pero con otra actitud.
Jorge Azcón (PP) incidió también en la "incapacidad" para dialogar y el "sectarismo" del Gobierno municipal, a quien acusó de poner un "cordón sanitario" a su partido, con el que dejan fuera a una parte "muy importante" de los zaragozanos, y a Rivarés de "reírse de la oposición" por no remitir la documentación que le solicitan.
El edil popular, quien aseguró que, con esta votación, se sienten "ganadores", señaló que lo que ha ocurrido es que los socialistas están "devolviendo a ZeC lo que le hizo tragar para la investidura del alcalde" y les pidió que "no tengan complejos" por haber llegado a un acuerdo con ellos y con Ciudadanos.
"Esto en Europa es normal", añadió.
Sara Fernández (Ciudadanos) situó su postura "exclusivamente" en su programa electoral, expresó su voluntad de seguir compensando futuras subidas del valor catastral en el IBI residencial y animó a que, además de recaudar, se eliminen gastos superfluos y se revisen las sociedades municipales.
Por último, el concejal de CHA Carmelo Asensio consideró que la solución final no es "ni la más justa ni la más equitativa", porque implica el incremento de un 5 por ciento del recibo en los inmuebles con valor catastral inferior a 70.000 euros y reclamó un plan de ayudas para las familias con más problemas.
Asimismo, se ongratuló del acuerdo para incrementar la bonificación al pago de la plusvalía del 75 al 95 por ciento en los tramos comprendidos entre los 0 y los 50.000 euros, que ha sido votado por todos los grupos, excepto el PP, que se abstuvo.
