El equipo de gobierno municipal ha aprobado este viernes definitivamente el cambio de nombre del pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza por el de José Luis Abós, denominación que la instalación municipal tiene desde hoy pero que coexistirá con la anterior hasta final de año.

El gobierno de la ciudad ha estudiado "detenidamente" las siete alegaciones que fueron presentadas en tiempo y forma respecto a esta decisión y ha optado finalmente por cambiar definitivamente la denominación, ha explicado hoy en rueda de prensa el concejal de Deportes del Ayuntamiento de Zaragoza, Pablo Híjar.

Atendiendo al informe elaborado al respecto por la sociedad Zaragoza Deporte, se ha acordado que ambas denominaciones coexistan hasta el 31 de diciembre de este año para "no desvirtuar" los patrocinios en marcha ligados al XXV aniversario de la inauguración de esta instalación deportiva.

Además, se facilita el trabajo de los distintos servicios municipales a la hora de acometer el cambio en los elementos de señalización, documentos o en la propia fachada del recinto, que será no obstante lo primero que se acometerá.

Híjar ha insistido, ante las críticas recibidas por el cambio de nombre y las alegaciones presentadas, que los informes jurídicos del consistorio no encuentran motivos por los que el gobierno debiera dar marcha atrás en una decisión que consideran legítima.

"Entendemos y respetamos las opiniones, pero es una cuestión discrecional, nosotros tenemos nuestra idea y el órgano competente para tomar la decisión es el gobierno municipal por delegación del alcalde", ha explicado el concejal.

Ha apuntado además que al equipo de gobierno municipal no le gustaría que se judicializara el asunto, aunque ha reconocido el "derecho" de cualquier grupo o persona a acudir a un contencioso administrativo que, por otro lado, no temen.

Por eso, ha pedido "respeto" para Abós, entrenador del CAI Zaragoza de baloncesto recientemente fallecido, y para "de una vez por todas" poderle hacer con esta decisión, que responde a una "petición popular", un homenaje "sin emborronar su figura".

Híjar estima que es "una estrategia equivocada" poner "en tela de juicio" la trayectoria profesional de Abós, cuyo nombre representa "los valores deportivos, y en concreto del baloncesto, de forma totalmente transparente".

Preguntado por el coste económico del cambio, Híjar ha dicho que el equipo de gobierno cuenta con una estimación, pero que se informará de ello cuando se formalicen todos los contratos que es necesario firmar para el cambio.

No obstante, ha asegurado que, "para desilusión" de quien pretende "torpedear" el cambio de nombre, éste "no va a suponer un esfuerzo inasumible, obsceno ni excesivo".

Además, Híjar ha recordado la existencia de "algunos informes" en los que había "cierta idea" de cambiar el nombre del pabellón por el de una marca comercial, algo que ha ocurrido en otras ciudades pero a lo que el gobierno de Zaragoza se opone.

"Un símbolo de la ciudad no se vende", ha reiterado en la rueda de prensa el portavoz del gobierno municipal, Fernando Rivarés.