Desalojados unos 50 sintecho que malvivían en una parcela junto a la estación de Delicias

El Ayuntamiento les ofreció alojarse en el albergue, pero lo rechazaron y algunos se han instalado en parcelas cercanas.
"Cuando se llevaron sus cosas salieron cientos de ratas que siguen por ahí", cuentan los vecinos

Varios sintecho viven en los quioscos de la plaza de la estación que da a la avenida de Navarra.
Desalojados unos 50 sintecho que malvivían en una parcela junto a la estación de Delicias
Francisco Jimenez

El asentamiento chabolista junto a la estación intermodal de Delicias ya es historia. Más de cuatro años después, los sintecho que ocupaban el solar entre la avenida de Navarra y la calle de Rioja –junto al centro cívico y el centro de salud Delicias Norte– han sido desalojados de este espacio. Lo hizo el Ayuntamiento de Zaragoza el pasado lunes por la mañana, aunque algunas de las personas que vivían allí salieron el domingo. Los vecinos de la zona, los usuarios del centro cívico y los profesionales y pacientes del centro de salud llevaban meses denunciando la insalubridad que suponía la presencia de este asentamiento chabolista. 


Los servicios sociales del Consistorio llevaban muchos meses trabajando con el casi medio centenar de personas que vivían en esta parcela, propiedad de una constructora. Una labor complicada, ya que se trataba de rumanos de etnia gitana, que apenas hablaban castellano y que rechazaban sistemáticamente cualquier tipo de ayuda o asistencia social. Además, las alrededor de 25 parejas que allí estaban no tenían hijos, y los servicios sociales sospechan que los mandaban a Rumanía con sus familias. Estos trabajadores creen que se dedicaban a la mendicidad de una manera organizada.


En los últimos días, los servicios sociales avisaron del desalojo a los afectados. Según testigos presenciales, se hizo el lunes a primera hora de la mañana, de manera pacífica y sin conflictos. Tras la salida de los chabolistas, se sacaron varios camiones con los restos que quedaban en el solar y que conformaban la estructura de las chabolas, así como toneladas de desperdicios acumulados en la zona. La DGA declaró "riesgo sanitario"

El Ayuntamiento había ofrecido reiteradamente a estas personas una ayuda, o incluso ser realojados "en el albergue municipal", según contó ayer el concejal de Acción Social, Roberto Fernández. Sin embargo, todos ellos "rechazaron la ayuda", según apuntó el edil socialista. Algunas de las personas desalojadas podrían haberse instalado en asentamientos cercanos. Según dijo Fernández, el Ayuntamiento estará "pendiente" de si se instalan definitivamente en algún otro punto, aunque no se descarta que abandonen la ciudad.


El Ayuntamiento decidió intervenir en este solar tras meses de denuncias por parte de los vecinos y visitantes de la zona. Incluso, el Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón realizó un informe calificando de "riesgo sanitario" la situación, por la cercanía del centro de salud Delicias Norte.


Los vecinos celebraban ayer el final del problema. José Luis Machín, propietario de la cafetería Norte –en la calle de Santa Orosia–, cuenta que el lunes por la noche tuvo que "cerrar la puerta" de su establecimiento "porque las ratas salían a cientos". "Aún están por ahí", añade. Tomás Alcai y José Luis Soria, vecinos de la zona, contaban ayer en este mismo local que "la situación era insostenible", porque se había creado un importante problema de "salubridad y de convivencia", ya que "las broncas entre estas personas eran comunes cuando bebían". Eso sí, apuntaron que no habían generado conflictos directos con el vecindario.Los quioscos ocupados

Mientras tanto, a escasos metros de este solar, un grupo de sintecho ocupan uno de los quioscos de la plaza que hay frente a la fachada de la estación intermodal que da a la avenida de Navarra. Su situación no escapa a los ojos de las pocas personas que pasan por este enorme espacio de hormigón, ya que tienen sofás y ropa tendida fuera del quiosco. La entrada fue forzada, y sus inquilinos han instalado candados para que no entre nadie. También siguen ocupados los quioscos de la avenida de Ciudad de Soria, que se iban a destinar establecimientos de hostelería, pero que el Ayuntamiento nunca llegó a adjudicar. Desde hace varios años también están ocupados por varias familias, aunque menos conflictivas que las del solar desalojado.