La Confederación de Empresarios de Zaragoza (CEZ) reclamó ayer al gobierno municipal del PSOE que haya un debate en el Ayuntamiento de la capital sobre las ordenanzas fiscales de 2015 y que se aproveche para rebajar la carga tributaria con el objetivo de "generar crecimiento económico". Como medidas concretas, la patronal defendió reducir los tipos del Impuesto sobre los Bienes Inmuebles (IBI), los coeficientes del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y la plusvalía, entre otros. 

La propuesta responde a la decisión del gobierno municipal de no presentar para su tramitación las ordenanzas fiscales de 2015 y prorrogar las de 2014 para propiciar de este modo la congelación de impuestos. Pero los empresarios recuerdan que "los tipos impositivos de la capital ya han crecido considerablemente en años anteriores", según explicó el presidente de la CEZ, Ricardo Mur. A su juicio, los empresarios precisan "de un gesto de apoyo" para "crear empleo y riqueza".

En el caso del IBI, según informa la CEZ, los tipos de gravamen que existen para los diferentes usos, excluidos los residenciales, oscilan entre el 0,7340% y el 0,8736%. Para la patronal zaragozano es necesario aplicar una rebaja "dentro de lo permitido por la Ley de Haciendas Locales". En este sentido recordó el efecto de la revisión catastral que entró en vigor el 1 de enero de 2013, que "incrementó considerablemente la cuantía pagada por este impuesto", tanto ese año como en 2014. Hay que recordar que la revisión catastral multiplicó por dos, con carácter general, las valoraciones de la ciudad.

Por este motivo, los empresarios defendieron que se aplique el artículo 72 de la ley, que establece que "por excepción, en los municipios en los que entren en vigor nuevos valores catastrales de inmuebles rústicos o urbanos, resultantes de procesos de valoración colectiva de carácter general, los ayuntamientos podrán establecer, durante un periodo máximo de seis años, tipos de gravamen reducidos".

Respecto al IAE, los empresarios piden una rebaja en los coeficientes de las cuotas tributarias, que según la situación física del local oscilan entre el 3,80 (primera categoría) y el 1,33 (novena categoría). Para la CEZ, "las subidas anteriores y el cambio en el callejero fiscal de 2012 agravó de forma desmesurada los incrementos de los coeficientes en polígonos que vieron modificada su categoría".

La CEZ hace referencia al impuesto que ha registrado un mayor incremento de la recaudación municipal tras la revisión catastral: la plusvalía. Los empresarios demandan "un replanteamiento en profundidad" de este tributo para corregir "el efecto multiplicador" que la subida de los valores ha producido. Además, los empresarios apuntan también a rebajar las tarifas del agua en los tramos más altos y la aplicación de las bonificaciones máximas para todas las ordenanzas fiscales.

La decisión del gobierno municipal de no tramitar las ordenanzas fiscales de 2015 no solo impide a los grupos políticos hacer aportaciones a través de votos particulares. Además, imposibilita que los agentes sociales y las entidades ciudadanas puedan presentar alegaciones, como suele ser habitual.