Tres festejos taurinos tienen la calificación de Fiesta de Interés Turístico de Aragón. El último en añadirse a esta lista es el Toro de Ronda de Cariñena, que recibió la declaración este martes, cuatro días antes de que comiencen los festejos, que se celebrarán entre los días 13 y 18 de este mes.

"El Toro de Ronda está muy arraigado, es una tradición que pasa de padres a hijos", explica Sergio Ortíz, alcalde de Cariñena. Esta es una de las claves para convertir una celebración en fiesta de interés. "Incluso hay marcas de vino que se llaman 'Toro de Ronda' o 'Toro de fuego' y este verano los niños jugaban a 'engamellarse' (ensogarse)", recuerda.

Durante los días de las fiestas de Santo Cristo de Santiago, tres toros embolados se sueltan en la plaza de toros y otros tantos en la calle Mayor. Este festejo es similar a los que se realizan en otras localidades, aunque tiene algunas diferencias que le han permitido conseguir esta denominación. "El animal lleva un yugo y se le ata con cuerdas. La forma de poner las cuerdas y el atado es única, lo que lo hace singular", subraya el alcalde. También ha sido necesario demostrar que la ciudad tiene la suficiente capacidad turística para absorber a los visitantes que acudan y darles un buen servicio hotelero y de restauración.

Otro requisito es acreditar su antigüedad. "Los primeros documentos gráficos datan de 1888. Entonces se lanceaba al animal, pero ahora se le respeta", indica. Aunque las referencias a esta fiesta se pueden encontrar mucho más atrás. "En 1667, Carlos II, que todavía era príncipe, se hospedó en la ciudad y presenció el Toro de Ronda".

El objetivo principal de buscar convertirse en fiesta de interés turístico ha sido promocionar el patrimonio cultural de Cariñena. "Como no sabíamos si iba a llegar a las fiestas, no habíamos preparado nada especial, pero después sí que habrá acciones promocionales", asegura. Entre las ideas se baraja convertir al Toro de Ronda en imagen de marca y realizar intercambios con Novallas y Pina de Ebro, las dos localidades aragonesas con fiestas taurinas calificadas como de interés turístico.

El trabajo para conseguir la declaración comenzó a mediados de 2012. Tanto el Ayuntamiento como la Comarca de Cariñena votaron a favor de pedir esta calificación "por unanimidad", asegura Ortíz. “El toro no sufre maltrato”, señala el alcalde. “El yugo no le hará especial gracia, pero las varillas que sujetan el fuego son muy altas y la llama no le llega al ojo”, explica.

PACMA presentará alegaciones

Ningún grupo con representación en la localidad votó en contra, pero el Partido Animalista ha anunciado que presentará alegaciones a esta declaración. “Estamos totalmente en contra. Ningún festejo en el que haya maltrato a animales debe ser considerado de interés turístico”, reclama Yasmina Larumbe, secretaria de organización de PACMA.

Para su partido, el toro sufre “pánico y estrés” durante el festejo. “Está fuera de su entorno, rodeado de gente que grita y chilla. El animal no estaría voluntariamente allí y es una falta de respeto”, asegura.