Imputado un hombre por pescar 230 peces con una red ilegal de 100 metros

En un local de San Andrés de la Barca se encontraron además 10 kilos de carpa congelada.

El Seprona ha imputado un delito contra la fauna a un hombre que fue sorprendido utilizando una red de 100 metros en el Paraje de Mas de la Punta, en Caspe.


El pescador había capturado más de 230 peces de diferentes especies, entre ellas carpas, una especie protegida en Aragón, que hay que volver a soltar tras su pesca.


Los hechos ocurrireron el pasado 26 de agosto, cuando una patrulla observó que se estaba utilizando una red de pescar, que medía 100 metros y estaba plomeada, un medio de pesca declarado como ilegal, masivo y no selectivo. En su interior se encontraban 230 ejemplares de peces de diferentes especies, como carpas, siluros, lucios y lucio-percas.


Los animales fueron devueltos al agua y los agentes se incautaron del trasmallo, dos cañas de pescar y una embarcación, entre otros efectos.


El imputado es L.X., un hombre de nacionalidad china y 42 años, que regenta un establecimiento hostelero en la localidad de San Andrés de la Barca (Barcelona). El local fue inspeccionado el pasado viernes ante la sospecha de que los ejemplares fueran destinados a consumo humano.


En un congelador encontraron 10 kilos de carpas congeladas en varias bolsas de plástico transparente, almacenadas para su preparación y venta. Tras comprobar que no disponían de documentación que acreditara su origen, los agentes las precintaron.


La investigación determinó además que los ejemplares del arcón habían sido capturados presuntamente por la misma persona en Caspe.


Durante la investigación se pudo determinar que los ejemplares hallados en el arcón habían sido presuntamente capturados por la misma persona que fue sorprendida en Caspe.


L.X. se enfrenta a la imputación de un delito contra la fauna por la utilización de medios de pesca masivos no selectivos. Además, ha sido denunciado por varias infracciones a la normativa de pesca en Aragón y a la Ley de aguas.


Una vez finalizada la investigación, la Guardia Civil remitió este martes las diligencias al juzgado competente. El pescado hallado en el establecimiento hostelero ha quedado precintado y a la espera de resolución judicial para determinar si también existe un delito contra la salud pública.