Primera reunión entre la CHE y los regantes para empezar a explotar la presa de Lechago

Las comunidades deben constituirse como futuros usuarios del embalse. La Confederación anuncia que la energía reservada abaratará el llenado

Los representantes de 21 comunidades de regantes de toda la ribera del Jiloca se reunieron ayer en Maluenda con el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Xavier de Pedro, para iniciar su constitución formal como futuros usuarios del embalse de Lechago. En quince días volverán a encontrarse con el fin de que antes de la puesta en explotación de esta infraestructura hidráulica haya una organización y se elija quiénes serán los interlocutores con el organismo de cuenca. Los regantes del Jiloca deberán decidir también si se quieren integrar en el Sindicato Central del Jalón.


En el encuentro de ayer se expusieron las dudas de algunos de los beneficiarios de Lechago por los costes que tendrá su llenado ordinario. Para la puesta en carga del embalse, fase en la que ahora se encuentra, se está llenando por gravedad desde el propio río Pancrudo, pero previsiblemente a partir de la campaña de riego 2015-2016 habrá que recurrir al bombeo de los caudales que lleva en invierno el Jiloca. Los costes energéticos que este bombeo conllevara, se consideran "muy elevados" e "inasumibles" por parte de algunos usuarios.


El presidente de la CHE anunció que se utilizará la energía de los saltos hidroeléctricos que tiene reservada el Estado y que la Confederación ha reclamado a las eléctricas. "Evidentemente habrá unos costes, aunque serán menores e inferiores al beneficio que se va a generar", dijo De Pedro. Esa reducción podría ser de entre un 20 o 25 %. También de Pedro manifestó que el Plan Hidrológico del Ebro contempla "zonas que son a revitalizar, y eso permite que la recuperación de costes pueda ser a otro ritmo" y la amortización sea a más largo plazo.


Este mismo año podrían hacerse las primeras pruebas de los equipos de bombeo y el primer llenado será sufragado por la Confederación. A partir de ahí se comprobará cuál es el gasto energético y los usuarios "irán entrando en las aportaciones en función de los beneficios que les repercuta el embalse", dijo el responsable del organismo de Cuenca. Ayer en Maluenda estuvieron regantes de Báguena, Burbáguena, Luco, San Martín del Río, Daroca, Murero, Villafeliche, Montón, Morata, Fuentes, Velilla, Maluenda, Paracuellos, y Calatayud. Usuarios de la provincia de Teruel expresaron su disconformidad. "Ahora regamos sin ningún problema, pagamos poco dinero, pero pagar mucho en nuestra zona es inviable porque es menor que aquí la rentabilidad de las parcelas", comentó un regante de Báguena.


Por el contrario, en el tramo bajo defendieron que hay que poner Lechago en marcha. "Los costes no los tenemos claros, los sabremos cuando la Confederación pague el primer recibo, pero hay que empezar a moverse", opinó Antonio Molina, de Paracuellos de Jiloca. En otra localidad, Maluenda, su alcaldesa, Carmen Herrero señaló que "las inquietudes que tienen los agricultores se pueden ir solucionando antes de que Lechago entre en explotación".


Por otra parte, el cauce del Jiloca se va a limpiar para mejorar su capacidad de desagüe. Se actuará este mismo año desde los Ojos de Monreal hasta su desembocadura en Calatayud.