Urbanismo exige demoler algunas naves de la torre Benjamín de Montañana

Desde el colegio Hermanos Argensola llevaban tiempo alertando del "foco de infección" que suponen estos edificios abandonados.

Una resolución del Ayuntamiento de Zaragoza exige al propietario de la finca conocida como torre Benjamín en Montañana que adopte de forma inmediata medidas de seguridad frente al "mal estado de la edificación".


Esta finca se encuentra ubicada en el camino del Arco de Montañana, junto al colegio Hermanos Argensola. La asociación de madres y padres del centro y la junta directiva llevaban tiempo alertando a la alcaldía del "foco de infección" que suponen estos edificios abandonados y exigiendo su demolición inmediata. "Está lleno de escombros, se mete gente que no tiene que meterse y allí aparecen incluso jeringuillas, por lo que es un peligro para la comunidad escolar", explica Antonio Guillera, presidente del AMPA del CEIP Hermanos Argensola.


Según relata Guillera, el propietario expuso en su momento que no podía afrontar la demolición de la estructura porque al ser los tejados de uralita, un material contaminante, el coste superaba los 24.000 euros.


Ahora el Ayuntamiento no deja lugar a dudas y exige al propietario que, antes de este jueves, emprenda medidas para garantizar la seguridad de una parte de la edificación (la antiguamente destinada a vivienda) y la demolición de las naves de uso industrial colindantes, que son las que tienen cubiertas de uralita y las que han sido declaradas "en estado de ruina inminente".


La resolución del Consistorio, basada en una inspección ocular del 27 de enero, concluye que existe un "riesgo inminente de caída" de estas naves y precisa que es "urgente intervenir para evitar riesgos a las personas y cosas".


El propietario, que reside fuera de Zaragoza, recibió este lunes la notificación y deberá tomar medidas antes de este jueves, cuando termina el plazo otorgado por el Ayuntamiento. Si a partir de ese momento sigue sin actuar, el Consistorio deberá hacerlo de manera subsidiaria y según ha informado cargará los costes de los trabajos al dueño de la finca.


Acciones a emprender

En el edificio que hacía de vivienda la resolución exige el desalojo de los escombros y elementos vegetales tanto del interior como del exterior, labores de desinfección, la reparación de la cubierta y el cerramiento de todos los huecos de la fachada (puertas y ventanas para que no pueda entrar nadie).


Del resto de edificaciones, se pide su demolición y el desescombro posterior del solar. El presidente de la asociación de vecinos Urdán, Daniel Usón, celebra la noticia por el peligro que suponen tanto estas estructuras como las personas que las frecuentaban para los escolares.


El grupo municipal del PP también se ha hecho eco de la noticia y su concejal Miguel Velilla ha expresado su "confianza en que Urbanismo vigile de cerca que la propiedad actúa de forma inmediata, ya que el deterioro que sufre esta construcción anexa al colegio entraña un riesgo para los niños que salen cada día al recreo".