Los residentes de la Casa Amparo de la capital aragonesa han reconocido esta Navidad la labor de los profesionales que les atienden incluyendo figuras de los cuidadores en su tradicional Belén.

El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, acompañado por el vicealcalde, Fernando Gimeno, el presidente de la Junta Municipal del Casco Histórico, José Manuel Alonso, y el director de la Casa Amparo, Gustavo García, ha visitado este jueves este centro para felicitar la Navidad a los residentes.

En declaraciones a los medios de comunicación, José Manuel Alonso ha subrayado que son personas "tremendamente activas" y este año, en el Belén situado a la entrada del edificio, han rendido homenaje a quienes han trabajado en estas instalaciones incorporando nuevas piezas al nacimiento, que se suman a las que han dedicado en años anteriores al cuerpo de Voluntarios de la ciudad.

"Esperemos que el año que viene podamos estar aquí también y en las mismas condiciones que estamos ahora, con los mismos recursos", ha deseado Alonso, al recordar que la reforma de la administración local "pone en duda las competencias del ayuntamiento en muchas cosas, entre ellas la gestión de esta Casa".

Por ello, ha remarcado que "esperemos que por el bien de todos, primero de los residentes, el año que viene estemos cuando menos en esta misma situación", si bien aún habrá que ver "cómo reacciona el Gobierno de Aragón a ese reto que supone la reforma local". 

Por su parte, el director de la Casa Amparo, Gustavo García, ha detallado que la residencia cuenta con 185 camas, de las que unas 170 están ocupadas, y en este equipamiento se sitúa el centro de convivencia de mayores del Casco Histórico y un comedor.

García ha advertido de que algunas zonas de la Casa, como los espacios para personas "con más necesidades de atención y con más deterioro cognitivo, están siempre al completo porque hay una demanda extraordinaria".

En este mismo sentido, ha afirmado que "los retrocesos en la ley de dependencia hacen que para estas personas con gran dependencia estemos permanentemente al cien por cien y si tuviéramos más plazas, estarían ocupadas".