El concejal del grupo municipal del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Zaragoza, Sebastián Contín, ha propuesta delimitar un máximo de metros cuadrados de publicidad exterior al detectar que "hay un exceso que afea la ciudad".

Contín ha anunciado que el PP presentará 20 votos particulares al borrador de reforma de la Ordenanza de Publicidad Exterior del Ayuntamiento de Zaragoza al apreciar que es "manifiestamente mejorable".

La finalidad de estos 20 votos particulares es "regular con más sensatez la publicidad exterior de Zaragoza porque es la ciudad que tiene más metros cuadrados dedicados a la actividad publicitaria tanto pública como privada, lo que provoca un exceso de carga estética que invade los espacios urbanos y hay que dar una solución".

Entre los datos que ha aportado de 2009 ha comparado los 73 metros cuadrados de Zaragoza por cada mil habitantes con los 67 metros cuadrados de Sevilla, los 47 metros cuadrados de Valencia, los 45 de Madrid o los 31 de Barcelona.

Proteger entornos BIC

En rueda de prensa, ha añadido que cuatro años después "se ha incrementado el número de soportes publicitarios", entre los que ha citado los del servicio Bizi, que explota la empresa 'Clear Channel', para estimar que Zaragoza "parece una ciudad anuncio, un parque temático y le hace perder efectividad".

Tras criticar que el borrador de la ordenanza "no entra en estos asuntos" ha defendido establece un máximo de superficie exterior dedicada a la publicidad que se distribuya por distritos y tras estudiar las propuestas del órgano asesor de publicidad que "no se ha reunido en cinco años" y reclaman que se reúna trimestralmente con la incorporación de representantes del sector publicitario.

Los votos particulares que presentará el PP solicitan que se proteja el entorno a integrar y "se prohíba con carácter general la publicidad comercial en los Bienes de Interés Cultural (BIC) y en los entornos BIC", además de que se empleen materiales reciclables.

A juicio de Contín "la propuesta de Belloch de prohibir la publicidad en los solares privados, que impide comercializar estos espacios, no es el problema porque el impacto es menor" para abogar por "nuevas formas de publicidad menos agresivas y que se permitan las actuaciones experimentales".