Educación

El presidente del Consejo Escolar tacha de "reto utópico" consensuar acuerdos

Marino Andrés ha comparecido este viernes ante la Comisión de Educación de las Cortes de Aragón para explicar su gestión al frente de este órgano.

El presidente del Consejo Escolar de Aragón, Marino Andrés, ha considerado este viernes un "reto utópico" la posibilidad de alcanzar acuerdos por consenso en el seno de este órgano en torno a medidas de la administración educativa.


Ya que en su opinión "todo tipo de decisiones y medidas que se toman por parte de la administración se ven mal de manera prestablecida por buena parte de los integrantes del consejo", han informado fuentes parlamentarias.


Andrés ha comparecido, a petición del PSOE, ante la Comisión de Educación de las Cortes de Aragón para explicar su gestión al frente de un órgano que, según ha explicado, ha incrementado tanto su actividad respecto a años anteriores como los índices de asistencia de sus integrantes.


"Desde el pasado mes de septiembre intenté buscar acuerdos que dieran más fuerza a los informes que se elaboran, para que no se pusieran de manifiesto de forma sistemática las discrepancias", ha explicado.


Y ha dicho a continuación que se ha dado cuenta de que "algunos consejeros convierten lo que deberían ser ideas y razones en ataques políticos, y así es muy difícil". "Aún así, no nos vamos a desanimar", ha añadido.


De esta forma, Andrés ha reconocido ante los parlamentarios autonómicos las dificultades a la hora de concretar los objetivos de su gestión.


El responsable de este órgano consultivo, quien ha recordado que "nunca he pertenecido a ningún partido político", se ha mostrado en desacuerdo con que los grupos parlamentarios cuenten con representantes en el Consejo Escolar de Aragón, como ocurre actualmente, han agregado las mismas fuentes.


Ya que a su juicio, además de que es el único órgano en el que se da esta circunstancia, "en el Consejo se debería debatir exclusivamente sobre cuestiones educativas".


Andrés ha resumido durante su comparecencia los objetivos y retos que han marcado su gestión en estos dos años: "Procurar conseguir acuerdos mayoritarios, dar a conocer este órgano ante la comunidad educativa y ante la sociedad en general y colaborar con otros consejos escolares".


Además de "consensuar el calendario escolar y continuar con los informes sobre la comunidad educativa para detectar lo que se hace bien y corregir lo que se hace mal".


También ha defendido la labor del grupo de trabajo por la Educación que elaboró el diagnóstico sobre el sistema educativo aragonés a instancias del Gobierno de Aragón, que, en su opinión, "no supuso menoscabo de las competencias" de ese organismo.


Asimismo ha puesto en valor la presencia de la consejera de Educación, Dolores Serrat, en este órgano, "hasta en tres ocasiones -ha puntualizado-, y además para dar la cara, no para celebraciones de ningún tipo".


La portavoz sectorial del PSOE, Maite Pérez, ha lamentado "la pérdida del consenso" que se ha producido en el funcionamiento del Consejo, "circunstancia más graves al producirse en estos momentos tan convulsos para la comunidad educativa", ha agregado.


Pérez ha situado en los ámbitos de la participación, la representación y el asesoramiento las "principales carencias" de la gestión del presidente de dicho órgano.


En este sentido, ha recordado, entre otras cuestiones, el "agravio" que supuso la creación del grupo de expertos para elaborar el diagnóstico sobre la Educación aragonesa, la ausencia de debates en asuntos "tan importantes como Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce)" o la "nula información" que se proporcionó a la hora de representar este órgano ante el Consejo Escolar del Estado.


El diputado Gregorio Briz, de CHA, ha criticado "actitudes y comportamientos que han dejado patente una falta total de transparencia" y que, durante este tiempo, "haya representado los intereses de algún que otro partido".


Por último, Adolfo Barrena, desde IU, se ha mostrado crítico ante el funcionamiento de un órgano que, "en vez de ser consultivo, se ha convertido en avalador" de la política educativa del Gobierno de Aragón, circunstancia que, en su opinión, "ha instrumentalizado" su función.


La representante del PP, María José Ferrando, ha defendido la gestión de Andrés, puesto que "asumir la presidencia de este órgano fue un reto muy complicado, puesto que la Educación aragonesa está inmersa en un estrepitoso fracaso que hemos heredado y, por tanto, es obligado introducir cambios", ha dicho.


Ferrando, en su condición de consejera de ese órgano, ha valorado la "transparencia y fomento de la participación que se hace", y ha lamentado la "instrumentalización" por parte de determinados sectores "olvidándose que el objetivo básico es el interés del alumno".


También María Herrero, del PAR, ha puesto en valor la función de asesoramiento y de debate del Consejo.