Día Internacional del Pueblo Gitano

"No todos los gitanos somos iguales"

Este lunes se celebra el Día Internacional del Pueblo Gitano, que sirve para recordar la situación de este colectivo.

El pueblo gitano festeja este lunes 8 de abril su día. Los claveles volverán a surcar el río Ebro para recordar el nomadismo de sus antepasados y, junto a la bandera gitana, se cantará el himno gitano, el Gelem, Gelem. Ambos se instituyeron un 8 de abril, pero de 1971, en el congreso gitano celebrado en Londres.


La celebración tendrá también su lado reivindicativo con la lectura de un comunicado en el que se recuerdan los problemas de este colectivo que forman 21.000 personas en todo Aragón, 18.000 de ellos en Zaragoza.


No son pocos. A los problemas de acceso a la vivienda, el trabajo o la sanidad que vive la población actual se les añaden otros, como la discriminación. La crisis no ha hecho más que agravarlos. “Todo lo que habíamos avanzado desde hace 30 años se está frenando o incluso está retrocediendo”, afirma Isabel Jiménez, responsable territorial de la Fundación Secretariado Gitano en Aragón. Los recortes en servicios públicos y sociales se notan, y más en unas personas que ya se encontraban en una situación precaria antes de la recesión económica.


El paro en la población gitana ha aumentado del 13,8% en 2005 al 36,4% de la población en España en 2011, según un estudio de la Fundación. “Se les atribuye que no les gusta trabajar, sin embargo está demostrado que son los que empiezan a trabajar antes y dejan de hacerlo más tarde”, asegura Jiménez.


El problema de la pronta incorporación al trabajo es un bajo nivel de estudios. En 2011, un 59,3% no tenía siquiera el graduado escolar y solo un 2,6% había conseguido un título de formación superior. El 99% de los niños están escolarizados y cursan la educación primaria, pero los problemas comienzan en la secundaria, cuando el absentismo aumenta. “A los 14 años se les ve como mayores y las familias los requieren para trabajar”, cuenta. Para cambiar esta inercia, se ha organizado el programa ‘Promociona’. Tutorías, apoyo escolar y trabajo con las familias y los centros educativos son las bases con las que se pretende mejorar la educación de la población gitana.


Más difícil es erradicar los estereotipos que se tienen sobre los gitanos. “Ladrones”, “vagos” o “malas personas” son algunas de las lindezas que los encuestados dedican a los gitanos y se recogen en el ‘Estudio anual sobre la discriminación por el origen racial o étnico’ de 2011. “Es un colectivo estigmatizado, se considera que todos los gitanos son iguales”, explica Jiménez. Sin embargo, cada familia ha evolucionado de una forma distinta. “Unos aceptan cien por cien las tradiciones culturales mientras que otros las acomodan y van tomando la cultura del lugar”.


No todo son malas noticias. El papel de la mujer es cada vez más importante, un motor del cambio de percepción. Cada vez cobra un mayor protagonismo, tanto dentro de las familias como ante la sociedad. “Aquí tenemos una presidenta de la Federación de Asociaciones Gitanas de Aragón, que es Pilar Clavería, otra presidenta en la Asociación de Mujeres Independientes Gitanas y yo misma soy una mujer gitana. La mujer gitana está cobrando protagonismo y se le respeta”, concluye.