Zaragoza

Denuncian el desmantelamiento de la lavandería de la Casa de Amparo de Zaragoza

La sección sindical indica que la mayoría de las máquinas habían sido adquiridas en torno a los años 2004 y 2005. Dicen que apenas se han utilizado y que se han vendido como chatarra.

La Casa de Amparo de Zaragoza
La Casa de Amparo de Zaragoza
ATO. ZARAGOZA

La sección sindical de CGT en el Ayuntamiento de Zaragoza ha denunciado que a principios de marzo una empresa de retirada de residuos desmanteló la lavandería de la Casa de Amparo. Este servicio, inactivo desde junio de 2011, estaba compuesto por cerca de una decena de máquinas con valores que oscilan entre los 3.000 y los 10.000 euros, según las mimas fuentes. CGT ha indicado que la maquinaria ha podido venderse como chatarra, extremo que ha negado Gustavo García, director de la instalación, que ha indicado que una empresa de recogida de residuos ha retirado las máquinas a coste cero “casi como un favor”.


“No sabemos el procedimiento que se ha seguido, si las máquinas se han vendido como chatarra o si el Ayuntamiento ha pagado por su retirada”, explicaban fuentes de CGT que decían tener “casi total certeza” de que el grueso de la maquinaria se adquirió entre los años 2004 y 2005 y solo se utilizó hasta junio de 2011.


En ese momento el servicio de lavandería de la Casa de Amparo fue externalizado a través de un concurso público. Una empresa zaragozana se hizo con el contrato por 868.987 euros (IVA incluido) y una duración de cuatro años. Además de dar servicio a la propia Casa de Amparo, la lavandería desmantelada también atendía a otros centros y servicios de Acción Social.


Hasta entonces, las instalaciones contaban con nueve máquinas y cinco trabajadores municipales empleados. “Cuando se tomó la decisión de externalizar el servicio no fue sindicalmente entendible, porque funcionaba bien, tenía personal cualificado y contaba con maquinaria en buen estado”, han explicado fuentes de la sección sindical de CC. OO. en el Consistorio.


Las mismas fuentes han añadido que el personal funcionario que se dedicaba a estas tareas fue reubicado. Cuatro lavadoras industriales, una secadora eléctrica y dos de vapor, una planchadora y un robot de planchado quedaron parados para siempre.


“El robot fue la última máquina adquirida por el Ayuntamiento, a finales de 2008. Costó entre 6.000 y 10.000 euros y se utilizó poco más de dos años”, han explicado fuentes de CGT. El precio del resto de máquinas estaría en una horquilla de precios similar, salvo las secadoras cuyo precio puede estar entre los 3.000 y 4.000 euros.

"El material estaba anticuado"

Gustavo García, director de la Casa de Amparo y del Albergue Municipal, ha confirmado que el material ha sido retirado de las instalaciones del centro y ha indicado que el Ayuntamiento “ni ha pagado ni ha cobrado nada” por esta operación. “La empresa que se ha llevado las máquinas lo ha hecho casi como un favor”, ha añadido, “solo desmantelar la lavandería necesitaba una cantidad de dinero importante”, ha remarcado.


García ha explicado que cuando empezaron los trámites para externalizar el servicio, el Ayuntamiento contactó con diferentes empresas de lavandería para venderles las máquinas. “No hubo ninguna empresa que quisiera comprarlas ni por un valor simbólico”, ha declarado.


“Pasados dos años o tres años esas máquinas prácticamente se convierten en chatarra y modernizarlas o adecuarlas resulta muy caro”, ha agregado para poner en valor el espacio libre que ha quedado en la Casa de Amparo tras el desmantelamiento de la lavandería. “Ocupaba el único espacio diáfano del edificio y nos viene muy bien como espacio de almacenaje”, ha dicho García.


Fuentes sindicales han señalado que el Ayuntamiento baraja poner este espacio al servicio del programa Zaragoza Redistribuye, algo que Gustavo García ha negado rotundamente.