Sin noticias del gato de Vadorrey

Todos los intentos han sido, de momento, en vano. Ni el agujero hecho en una de las arquetas del colegio de Vadorrey, ni el aplique de luz que le alumbra el camino, ni las grabaciones de maullidos han hecho salir al gato atrapado en los conductos de ventilación. Tras ocho días de intensa búsqueda y más de un quebradero de cabeza, las protectoras de animales temen lo peor, aunque -aseguran- mantienen la esperanza.

Después de un intento de rescate fallido el viernes, al que acudieron los bomberos, un arquitecto de la DGA, el encargado de las obras del colegio y la protectora de animales Cuatro Gatos, ayer volvieron a intentarlo. «El arquitecto, muy amable y aunque era sábado, se acercó al colegio por la mañana y por la tarde para abrirnos la puerta y poder comprobar si el gato estaba en la jaula», explicó Beatriz, de Cuatro Gatos. Sin embargo, al abrir la puerta de la habitación -todavía sin uso- en la que se ha hecho el agujero de salida (el único posible), la jaula seguía vacía. «Se nos cayó el alma al suelo. Estuvimos media hora esperando, pero no apareció. No sabemos si logra oir los maullidos o ver la luz», apuntaron.

De momento, lo único que pueden hacer es esperar y seguir intentándolo. El encargado de obra ya avisó el viernes de que levantar el suelo era «impensable» porque se desconoce «dónde está el gato, ya han empezado las clases y hay hilo radiante e instalaciones eléctricas subterráneas». En caso de que falleciera, asegura que no habría problemas para los niños porque los conductos «no conectan con el interior del centro».