¿Quién se monta en los barcos del Ebro?

Los Ebrobuses viajan muchos días entre semana semivacíos. La empresa se niega a dar datos del número de usuarios, aunque afirma que «la temporada va bien».

Los Ebrobuses, en el embarcadero de Vadorrey
¿Quién se monta en los barcos del Ebro?
P. F.

El viento y la crisis afectan a uno de los proyectos turísticos estrella del Ayuntamiento de Zaragoza: la navegación con barcos por el Ebro. Los Ebrobuses llevan un mes navegando, pero los barcos no se llenan. El viento ha obligado a suspender algunos viajes en las últimas semanas.


Unos turistas o zaragozanos que quieran montar en los barcos y acudan al embarcadero de Vadorrey, al Náutico o a la Expo se encontrarán con que no hay taquilla de venta de billetes ni ningún punto de información (solo un cartel). Los billetes se venden directamente en el barco. Sí hay un número de teléfono (687-278 311) al que llamar para preguntar horarios, tarifas o si los barcos funcionan.


En el primer barco de ayer por la mañana (salida a las 11.50 de Vadorrey) viajaban siete personas: un matrimonio y sus dos nietos, y otra pareja con una hija adolescente. El número de plazas disponibles es de 23 más la tripulación. Todos querían navegar hasta la Expo, pero hasta el momento de zarpar no sabían si se podría por el viento. Finalmente, ayer sí fue posible.


«El patrón decide si se sale y si el barco puede hacer el trayecto completo, depende del viento y del calado. En los últimos días hemos tenido que suspender varios viajes por el viento. Algunos días solo hemos navegado hasta el puente de Santiago y un par de días se han tenido que suspender todos», explica Rafa Fernández, marinero. En cada Ebrobús viaja un patrón y un marinero para amarrar el barco y ayudar a los viajeros a embarcar y desembarcar.


«Hemos venido otros veranos y nos gusta mucho. Este año es la primera vez que venimos para enseñárselo a nuestros nietos. Las vistas son muy bonitas. Es una pena que venga poca gente, es una buena idea para la ciudad», afirman María Pilar Rodríguez y Mariano Giménez. Los chicos, Mario y Lucía Giménez, de 9 y 5 años, están encantados. El viaje de los cuatro desde Vadorrey a la Expo y volver les cuesta 30 euros y aproximadamente una hora y veinte minutos.


«En fin de semana vamos más llenos, vienen muchos turistas y familias de Zaragoza. En sábado y domingo podemos llevar de media entre 80 y 90 personas en todo el día. Entre semana, unas 5 o 6 personas por viaje», cuenta el marinero.


La empresa Turismo Ebro Fluvial es la concesionaria del servicio. La temporada comenzó el 25 de junio y de momento la empresa se niega a dar datos del número de usuarios. Responsables de Turismo Ebro Fluvial afirman que «la temporada va bien». «El año de la Expo fue el boom y luego el número de viajeros se ha estabilizado. La crisis se nota», admiten.


De martes a jueves, se realiza el recorrido entero (Vadorrey, Náutico, Expo, Náutico, Vadorrey) cinco veces al día. Los viernes hay 7 viajes completos. Y los viernes y fines de semana, 9. Hay varias tarifas, según el recorrido y la edad. Por ejemplo, un viaje de Vadorrey a la Expo cuesta 6 euros para adultos, y 3 para niños entre 3 y 10 años, mayores de 65 y desempleados. La vuelta completa cuesta 10 euros para adultos y 5 para el resto.


Los recorridos por el Ebro comenzaron en 2008 y han estado rodeados de polémica por los dragados del río y los costes que han supuesto para el Ayuntamiento. 

Críticas del PP a la gestión y a la falta de información

El PP ha denunciado en varias ocasiones que la puesta en marcha del proyecto de navegabilidad supuso una inversión inicial de más de 4 millones de euros, entre la construcción de los embarcaderos, el rebaje del puente de Piedra y el dragado, además del mantenimiento anual.


«Mantener el capricho de los barcos supone demasiado esfuerzo para tan pobre resultado. Los cruceros por el Ebro se han convertido en un gran misterio: ese empecinamiento por dragar, obviar el impacto ambiental, las numerosas dificultades técnicas y que el Ayuntamiento asuma las pérdidas de una empresa privada», subraya el concejal del PP Sebastián Contín.