María Pilar Hernández vive en la calle de las Navas de Tolosa desde hace tiempo, y lleva varios años viendo como se deteriora esta vía zaragozana: "El parón inmobiliario nos ha dejado en herencia tres solares, uno pequeño, pero los otros dos enormes. El vallado de uno de ellos ocupa parte de la acera así como los postes para sujetar su tendido eléctrico", cuenta María Pilar.

Lo cierto es que, recorriendo esta calle se observa, a primera vista, el mal estado de los solares mencionados, que acumulan suciedad en su interior. Concretamente en el que hace esquina con Tenor Gayarre, las vallas de acceso están rotas, por lo que cualquiera puede acceder al recinto. María Pilar afirma que este lugar está en estas condiciones desde hace casi cinco años. "Es una lástima que esta zona, ubicada en los limites del barrio de las Delicias, escondida durante décadas tras las antiguas vías del tren siga siendo la gran olvidada", comenta María Pilar, que se ha dirigido al Ayuntamiento de Zaragoza en más de una ocasión, sin haber obtenido una solución al respecto. Mientras, los vecinos se las ven y se las desean para transitar por esta calle, plagada de postes en mitad de unas aceras que de por sí son demasiado pequeñas.

El solar más grande se encuentra frente al número 50 de la mencionada vía, haciendo esquina con Tenor Gayarre. En su interior no es extraño ver colchones, botellas de vidrio, plásticos y demás desperdicios que, poco a poco, se han ido acumulando allí. El hecho de que la verja de acceso esté rota y en el suelo, facilita que se depositen en el entorno este tipo de basuras.

Sergio Huerta también es vecino de la zona y cree que "se debería actuar y cuidar más este tipo de solares, como se hace con algunos suelos municipales. El problema es que al ser privados, poco se puede hacer".

Este tipo de terrenos sin edificar abunda en la capital aragonesa por el efecto de la crisis. Muy cerca de esta zona se encuentran otros espacios a la espera de urbanizarse, como ocurre en la calle de Vicente Berdusan, calle Moncayo o en el entorno de la estación del Portillo.

En referencia a este tipo de conflictos, el Ayuntamiento de Zaragoza solo puede actuar en casos puntuales, cuando estos solares de titularidad privada incumplan las normativas municipales sobre vallado y limpieza.