La Audiencia de Zaragoza ha absuelto al empresario Fernando Valero P. L. del delito de apropiación indebida por el que la Fiscalía pedía que fuese condenado a dos años de prisión. Le acusaba de quedarse con un vehículo Mercedes valorado en 90.509 euros, pese a no haber terminado de pagarlo. Sin embargo, el tribunal concluye que no cabe imponer ninguna pena al empresario. Y lo hace porque no consta que la supuesta perjudicada, la financiera con la que se había firmado un contrato de renting, haya reclamado cantidad alguna al acusado.

La denuncia fue presentada por la mercantil Viviendas y Calidad de Edificaciones S. L., sociedad que se constituyó en 1999 y de la que eran propietarios dos socios a partes iguales: uno de ellos, el acusado. Cada uno de ellos adquirió un vehículo de alta gama en junio de 2006, y lo hicieron a través de la empresa y mediante sendos contratos de renting. La sentencia considera probado que para el pago inicial del vehículo en litigio se hizo entrega de otro Mercedes Benz. Después, la sociedad comenzó a pagar 36 plazos por importe de 174 euros cada uno. Satisfechas estas cuotas, el contrato estipulaba que el propietario debía hacer frente a un pago final de 34.393 euros, o bien hacer entrega del coche.

Según la Sección Sexta de la Audiencia, Viviendas y Calidad de Edificaciones no ha resultado perjudicada, ni tampoco su administrador único (socio del acusado), "ya que ni consta que deban satisfacer el importe adeudado ni que el mismo les haya sido reclamado por quien debía cobrarlo".

Entiende el tribunal que, como apuntó la Fiscalía, ha existido una defectuosa instrucción de este asunto, que debía haberse resuelto por la vía civil, por darse, en el peor de los casos, un incumplimiento de contrato. Sin embargo, la financiera no ha reclamado cantidad alguna.