El zaragozano Carlos Alberto Biendicho murió a los 55 años el pasado día 16 de noviembre en Madrid a consecuencia del cáncer asociado al sida, que nunca escondió. Su final fue en silencio, en contra de su costumbre de haber siso un batallador en la sociedad por la dignidad de quienes habían adquirido el VIH o miembros del movimiento de gays y lesbianas. Defendió la visibilidad pública de los enfermos y los homosexuales para que se abrieran todos los armarios.

Biendicho fue un referente de la Asociación para la defensa de las personas afectadas por el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida VIH, Omsida, y de los primeros que defendió exhibir de cara la enfermedad ante la sociedad aragonesa a mediados de los años 90. Reclamó en las Cortes de Aragón el apoyo médico con centros de día para los seropositivos, campañas de prevención y de información para cientos de personas que se hicieron la prueba del sida a raíz de trasfusiones de sangre con reactivos defectuosos.

Su marcha a la capital y afiliarse al Partido Popular lo catapultó a los medios de comunicación nacionales. Creó la Plataforma Popular Gay en el PP, aunque no podrá ver si triunfa o pierde el recurso de inconstitucionalidad interpuesto en 2005 por su partido contra la ley de los matrimonios homosexuales.

Fue militar y seminarista, antes que un personaje público por el sida y la homosexualidad. “Mi madre me parió vago y maleante, después fui peligroso social, posteriormente fui presunto delincuente hasta 1986 (en el Ejército fue delito hasta esa fecha), hasta 1.992 tenía un trastorno psicofisico, aunque en 1.988 ya me había diagnosticado el VIH. Pero ante todo soy superviviente de la raza humana”, se definía en su blog www.terrorismohomofobico.blogspot.com.