Ronni Marcelo Molina Flores, el joven de 19 años que sufrió un severo traumatismo craneoencefálico durante el festejo de vaquillas en la mañana del pasado viernes, continúa en estado crítico. Al cierre de esta edición permanecía estable, dentro de la extrema gravedad, en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Miguel Servet.

El joven, nacido en Ecuador y residente desde hace nueve años en la capital aragonesa, era la primera vez que iba a las vaquillas. Al saltar al ruedo, el animal le alcanzó y cayó golpeándose la cabeza. Una vez en el suelo, la vaca siguió embistiéndole y lo pisó varias veces. Ronni Marcelo Molina quedó inmóvil en el albero hasta que el resto de los corredores lograron despistar al astado y sacar al herido de la plaza. En un primer momento fue atendido por una ambulancia de la Cruz Roja (de soporte vital avanzado), que lo trasladó rápidamente al Servet. En el centro hospitalario fue intervenido quirúrgicamente e ingresado en la UCI.

Sus familiares explicaron el día del accidente que los médicos les habían dicho que los próximos tres días serán decisivos para saber si vivirá o en qué estado saldrá adelante, sino se produce un desenlace fatal a consecuencia de un infarto.

Sus primos y su hermana fueron testigos de la cogida y están completamente destrozados. No obstante, tienen esperanza en la fortaleza y la juventud de Ronni Marcelo para que pueda recuperarse. El chico es un joven muy tranquilo y estudioso que, tras terminar Bachillerato, ha comenzado un Grado Superior. Su tío José Hidalgo se lamentaba amargamente por el accidente sufrido por su sobrino.

Por su parte, la consejera aragonesa de Salud y Consumo del Gobierno de Aragón, Luisa María Noeno, se refirió ayer al estado del joven y explicó que "está siendo tratado y está evolucionando". Añadió que confía que se recupere con normalidad. La consejera, -que hizo estas declaraciones durante una rueda de Prensa convocada con motivo del encierro de los médicos-, lamentó que en un espacio lúdico y de disfrute haya accidentes tan graves, aunque precisó que afortunadamente los leves son los más numerosos.

Durante las vaquillas de ayer, los servicios sanitarios de la Cruz Roja prestaron 18 asistencias. De todas ellas, 17 fueron por contusiones por cogida y una por herida de asta.

De los atendidos en la plaza, tres fueron trasladados a centros hospitalarios: uno por fractura de rodilla, otro por fractura de pierna y el tercero por herida de asta de vaca en una pierna que, en principio, no parecía grave, según informaron fuentes de la Cruz Roja. En el dispositivo participaron 40 sanitarios de la organización, apoyados por dos ambulancias de soporte vital básico y por una de soporte vital avanzado.