Cocinar con un horno solar; reducir, reutilizar y reciclar los residuos; apagar la pantalla del ordenador y llevar el aceite usado a los puntos limpios son algunos de los mensajes que los más de setenta voluntarios de la Caravana Universitaria por el Clima han hecho llegar a unas 8.000 personas. La expedición verde ha recorrido alrededor de 900 kilómetros durante esta semana: desde Barbastro a Zaragoza, pasando por Ejea de los Caballeros, Alcañiz y Sabiñánigo.

En cada uno de los destinos, los jóvenes universitarios se dirigían a colegios, institutos, asociaciones y curiosos para explicarles las claves del desarrollo sostenible y corregir sus malos hábitos. Mediante la "Huella Ecológica", un test que los voluntarios han realizado a todos los que se acercaban a los puntos verdes, se puede conocer cuántos planetas como el nuestro serían necesarios para seguir consumiendo recursos al mismo ritmo y alojar todos los residuos que generamos.

Cada día, a las ocho de la mañana, el autobús esperaba a los universitarios ataviados con polos verdes en el Campus de San Francisco y comenzaba el viaje. La recepción del alcalde en la localidad de destino inauguraba la jornada que proseguía con el montaje de la carpa informativa y la visita a colegios, institutos y asociaciones.

Uno de los artilugios que despertó más interés entre la población fue la cocina solar. "Esta mañana hemos hecho manzanas asadas con miel en una hora y media", explicó un voluntario el jueves. Esta cocina cuesta unos 150 euros pero tiene una pega, si no hay sol, no funciona.

"Estoy muy satisfecho, creo que el objetivo está cumplido", apuntó Lucio de la Cruz, coordinador de la Oficina Verde de la Universidad de Zaragoza. De la Cruz reconoció que esta experiencia ha superado a la del año pasado porque se ha dirigido a un mayor espectro de población al incluir en el programa de actividades a las Asociaciones de la Tercera Edad y a las de Amas de Casa.

La Oficina Verde, que comenzó su andadura en septiembre de 2007, actúa en dos frentes: el técnico, que atañe directamente a la institución, y el de sensibilización de la población. Esta caravana por el Clima se enmarca en las actividades del Mes del Medio Ambiente, que engloba también la andada en los Galachos de Juslibol del domingo pasado, un ciclo de conferencias temáticas sobre el medio ambiente y las cuatro visitas de "Zaragoza Entorno Sostenible". El objetivo es promover la protección del entorno natural.

La labor de esta oficina continúa con actividades similares centradas en el ahorro energético en noviembre y el de consumo de agua en diciembre. Las actuaciones de la Oficina Verde ya comienzan a ser una realidad dentro de la Universidad de Zaragoza. Por ejemplo, se han colocado once puntos limpios, varios urinarios secos y se controla el consumo de agua mensualmente para evitar fugas y despilfarros.

Seguimiento informativo

Nueve estudiantes de Periodismo, también voluntarias, han seguido los pasos de la caravana. Beatriz Aranda, Lucía Aresté, Laura Carnicero, Laura Escuer, Sonia Linacero, Laura Sabater, María Pilar Soro, María Eugenia Tapia y Lara Zapata se han embarcado cada día en el autobús y han informado desde dentro y con criterio periodístico de esta iniciativa medioambiental. El resultado se puede ver en www. heraldo.es/suplementos/caravana_universitaria_por_clima.html