La subida del IBI y del IAE a las grandes empresas anunciada por el Ayuntamiento de Zaragoza provocó ayer una reacción inmediata en las organizaciones empresariales de la ciudad. Tanto la Confederación de Empresarios de Zaragoza (CEZ) como la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa Aragonesa (Cepyme) criticaron con dureza el proyecto de revisión de ordenanzas fiscales presentado por el Gobierno PSOE-PAR, que se pactó previamente con Izquierda Unida pese a las reticencias del Partido Aragonés y que afectará a alrededor de 3.000 empresas.

De hecho, la CEZ y la Cámara de Comercio ya avanzaron ayer mismo que recurrirán la normativa ante el Ayuntamiento cuando se abra el plazo; Cepyme, por su parte, dijo que esperará a la reunión que tienen hoy con el vicealcalde y consejero municipal de Hacienda, Fernando Gimeno, para conocer los detalles y tomar una decisión después. Todas las organizaciones empresariales coincidieron en el enfado por el incremento de la presión fiscal a las grandes empresas -del 20% en el IBI y de entre el 10% y el 51% en el IAE de las compañías del centro y la periferia de la ciudad-.

José Enrique Ocejo, secretario general de CEZ, dijo que su organización está "en contra de cualquier subida de impuestos". "En la actual situación, la fórmula para reactivar la economía no es esta", señaló Ocejo. Para él, "en un momento en el que el consumo no repunta, los grandes comercios e hipermercados también tienen problemas, cosas como estas complican aún más la situación". Ocejo advirtió de que "al final el que lo paga es el ciudadano" y de que el empleo en estas empresas "se puede ver afectado".

Por su parte, Aurelio López de Hita, presidente de Cepyme, quiso esperar a la reunión que tendrá hoy con Gimeno para valorar en profundidad la subida fiscal a las grandes empresas, pero ayer avanzó que "no es el momento de tomar medidas de este tipo". "No parece muy sensato subir el IAE en general sin saber cuál es el resultado de la actividad de las empresas". Por eso, avisó: "Hay medianas empresas que facturan un millón de euros y que no tienen beneficios, por lo que sufrirán mucho medidas así".

Por su parte, la Cámara de Comercio convocó ayer mismo y de urgencia la comisión fiscal para el día 19, y anunció que también recurrirá la medida. "Es una locura, el IPC está por debajo del 2% y quieren subir el 20%", apuntó José Miguel Sánchez, secretario general de la Cámara. Sánchez advirtió del riesgo de que se cree un efecto de "expulsión de empresas" de centros como Plaza o Empresarium.

La subida del IAE afectará a casi 3.000 empresas (concretamente, a 2.982, las que facturan más de un millón de euros y están ubicadas en las calles de categoría 1, 2, 7, 8 o 9, es decir, el centro de la ciudad o el extrarradio). En su día, algunas de estas zonas estuvieron bonificadas por el Ayuntamiento, principalmente para atraer compañías a los polígonos y centros comerciales. El Consistorio ha calculado que ingresará el año que viene 2,89 millones de euros más gracias a este incremento.

En cuanto al IBI, aumenta el tipo un 20% para los inmuebles urbanos no residenciales con un valor catastral de más de un millón de euros. Se calcula que esta medida afectará a más de 400 empresas, que poseen casi 700 inmuebles en distintos puntos de la ciudad. Con este incremento fiscal entrarán en las arcas municipales 2,59 millones de euros más.