MOVILIDAD URBANA

Un anillo ciclista verde de Zaragoza, muy verde

En Zaragoza, dos años después de la inauguración del carril bici que circunda varios de sus barrios periféricos, como el de Miralbueno, todavía existen algunas brechas por donde es imposible circular.

Sin fecha de ejecución. El parón que sufre el entormo del barrio del AVE hace inviable que se acometan las obras de remodelación de este pequeño viaducto hasta que se apruebe el proyecto de urbanización.
Un anillo ciclista verde de Zaragoza, muy verde
ESTHER CASAS

El anillo verde de Zaragoza es una vía que conecta los barrios y zonas periféricas con el centro de la ciudad. Pero el círculo no se ha cerrado por completo, todavía queda algún flanco, como el del antiguo puente ferroviario que une el entorno del barrio del AVE, al final de la avenida de Navarra, con el barrio de Miralbueno.


Desde 2008, año en que se inauguró esta vía ciclista, el viaducto por el que debería discurrir un carril bici entre ambos barrios sigue sin abrirse, a la espera de que se urbanice el entorno de la estación Delicias.


El Ayuntamiento de Zaragoza es el encargado de acometer las obras del corredor verde cuya primera fase ya está concluida. Actualmente, se está trabajando en la segunda, en el barrio Oliver. Sin embargo, el Consistorio zaragozano no es responsable de ejecutar las obras del puente ferroviario, sino que la sociedad Zaragoza Alta Velocidad es la encargada de dicha realización. Fuentes de este consorcio aclaran que no estará terminado "hasta que el proyecto de urbanización del barrio del AVE esté aprobado". Algo que, al parecer, todavía tardará tiempo y, previsiblemente, no será una de las actuaciones urbanísticas prioritarias.


Un alto en el camino

Actualmente la pasarela cercana al Camino del Pilón se encuentra vallada, lo que obliga a los vecinos de Miralbueno a cruzar con sus bicicletas por pasos alternativos, como son la carretera de Logroño y el 'scalextric' de la avenida de Navarra.


Hay vecinos que burlan el vallado y cruzan por este paso, incluso en bici, pero al llegar al extremo que da al barrio del AVE las ruedas se clavan en la gravilla, teniendo que continuar el paseo a pie. "Deberían preocuparse un poco y terminar las obras, que no cuestan tanto", comenta Jesús García, un residente de Miralbueno que se queja de que, para dar un paseo con sus hijos, tiene que jugarse el tipo cruzando por la autovía de Logroño.


Para Luis Gargallo, presidente de la Asociación de Vecinos de Miralbueno no solo existe el problema del inacabado anillo verde sino que, además, "el abandono y el vandalismo en el corredor está haciendo mella en el entono de este barrio zaragozano", añade.


El uso de la bicicleta ha crecido exponecialmente en Zaragoza, algo propiciado por la expansión de kilómetros de carril bici en el centro. Pese a algunas otras cicatrices en su trazado, la ciudad va asimilando poco a poco que este medio de transporte se está imponiendo al uso del automóvil.


La capital aragonesa contará a finales de 2010 con casi 104 kilómetros de vías ciclistas. Una apuesta decidida por el medio de transporte menos contaminante.