SUCESOS

Ocupa un almacén de material de obra y vende las cosas como si fueran suyas

El estafador, que fue arrestado, vivía en una finca del Burgo de Ebro sin permiso de sus dueños.

Un hombre de 31 años, natural de Valencia, y que ha hecho de la estafa su forma de vida, fue detenido el pasado martes por la Guardia Civil cuando circulaba en un turismo por la carretera N-232 hacia Zaragoza. Los agentes del puesto del Burgo de Ebro lo arrestaron como presunto autor de los delitos de robo con fuerza en las cosas, estafa y usurpación.

Según informó ayer la Comandancia de la capital aragonesa, entre el jueves 22 de julio y el pasado día 26, M. A. R. T. forzó el candado del recinto vallado de acceso a un almacén de material y maquinaria de construcción, situado en el paraje Mejana de la Noria, en el término de El Burgo de Ebro, y colocó un candado propio.

Posteriormente, se puso en contacto con dos representantes de una empresa de desguaces y chatarra de Zaragoza, ante los que se identificó como propietario de material de obra para vender. Mediante este engaño, los convenció para trasladarse hasta la nave de El Burgo de Ebro y, tras franquearles la entrada, les ofreció los distintos utensilios que allí había. Los representantes, F. J. P. U. y J. M. L. S., decidieron adquirir láminas de encofrado, herramientas y maquinaria y le pagaron 4.000 euros.

No obstante, los agentes de El Burgo comprobaron después que todos esos objetos no estaban respaldados por factura alguna ni se habían dado de alta en los libros de registro correspondientes, por lo que decidieron imputar a los chatarreros un delito de receptación, es decir, comprar un objeto sabiendo que su procedencia es ilícita.

En el transcurso de las investigaciones, los guardias civiles averiguaron también que M. A. R. T. vivía en las instalaciones de una finca ecuestre en la que no se lleva a cabo actividad industrial, próxima al almacén que había ocupado en la Mejana de la Noria. Según estas fuentes, el detenido carecía de la autorización correspondiente de los propietarios, por lo que se le imputa también un delito de usurpación.

El arrestado tiene numerosos antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio y estafa, actividad delictiva que comenzó en 1998 y se ha prolongado hasta la fecha, de momento.

La Guardia Civil ha recuperado el material sustraído que, a expensas de que la maquinaria pueda ser puesta de nuevo en funcionamiento y sumando los daños producidos, el valor podría oscilar entre los 150.000 y 320.000 euros.

Los agentes contaron en esta investigación con la colaboración de miembros del Cuerpo Nacional de Policía de Zaragoza.