Catalá se marcha a la embajada de España en Chile

El socialista Francisco Catalá se ha despedido hoy del Ayuntamiento de Zaragoza, entre los sentimientos encontrados que le han expresado sus compañeros de Corporación y el "máximo honor" de haber servicio a esta ciudad durante los últimos cinco años, como responsable de las arcas municipales.

"No podré evitar realizar el seguimiento de todo lo que salga sobre el Ayuntamiento de Zaragoza, porque quien ha sido concejal de este ayuntamiento no deja de serlo y 11.000 kilómetros no es mucha distancia para ello", ha dicho Catalá en su discurso de despedida del ayuntamiento, para asumir en la embajada de Chile como consejero Laboral y de Inmigración.

Para Catalá, servir a esta ciudad ha sido "el máximo honor", porque le ha permitido "tener buenos amigos, buenos compañeros de viaje, pocos enemigos y buenos adversarios políticos".

Ha pedido al concejal de IU, José Manuel Alonso, que siga esforzándose por conseguir que la ciudad salga adelante en los máximos temas que pueda, al portavoz de CHA, Juan Martín, le ha agradecido que haya interrumpido sus vacaciones aunque no sepa si ha sido para despedirle o para asegurarse que se va, así como sus críticas, que le han servido para corregir errores, y compromisos, que espera que sirvan para salir de la crisis.

Aunque ha reconocido que en ciertos momentos ha sobrepasado los límites con la portavoz del PP, Dolores Serrat, ha dicho que no han servido para empañar la relación y le ha agradecido que haya distinguido los planos políticos de los personales en su decisión de dejar el consistorio.

Ha pedido disculpas a los tres partidos de la oposición por si ha tenido excesos de vehemencia, que han sido, ha asegurado, "absolutamente intencionados pero también políticos y espero que inanes a nivel personal". Ha alabado a Manuel Blasco (PAR), a quien confía en ver sentado mucho tiempo al lado del alcalde, Juan Alberto Belloch, una persona con la que ha sido "un privilegio poder trabajar", que es un "gran alcalde" y que ha logrado tener un equipo cohesionado, según ha declarado a los medios.

También ha agradecido las palabras del portavoz socialista, Carlos Pérez Anadón, y su capacidad política, y la constante atención de los medios de comunicación a su área, sus críticas, que le han hecho mejorar, y las alabanzas aunque ha confesado que no recuerda ninguna" al tiempo que ha asegurado tener "los mejores funcionarios de la administración local".

Entre las "espinas" que se le quedan clavadas y no ha podido solucionar figuran la financiación de la administración local, que a pesar de ser "una vergüenza" la situación en que se encuentra, tendrá que esperar a una época de estabilidad económica para poner encima de la mesa las normas y las leyes.

Catalá se incorporará el jueves a un nuevo puesto de diplomático que le "apasiona" como es defender los intereses de los trabajadores y ciudadanos españoles en el exterior, "facilitar las cosas" de los chilenos que quieren venir a España y de las empresas que estén o quieran instalarse en el país suramericano, en el que permanecerá cuatro o cinco años, ha declarado.

Para Catalá también será una satisfacción que su primera tarea pueda ser prestar atención al Real Zaragoza, equipo que está previsto que viaje en la pretemporada. El puesto como concejal de Francisco Catalá será ocupado por Manuela García Villamayor, quien actualmente ocupa un puesto de funcionaria en el Ayuntamiento.