GENERAL JEFE DE LAS FAMET

"San Gregorio es lo más parecido a Afganistán que podíamos encontrar"

Dirige el ejercicio 'Azor', que reúne en San Gregorio a helicópteros de combate de casi toda Europa.

El general Miguel García de las Hijas, en San Gregorio.
"San Gregorio es lo más parecido a Afganistán que podíamos encontrar"
TONI GALáN/APG

Estamos acostumbrados a las maniobras de San Gregorio. Pero el ejercicio 'Azor' no tiene precedentes.

Se trata del mayor entrenamiento de helicópteros militares que se hace en Europa, y llevamos meses preparándolo. Contamos con 32 helicópteros de países amigos, a los que hay añadir los diez nuestros (Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra), dos de la Armada y otro del Ejército del Aire.

Pero vinieron a San Gregorio buscando el calor y se han encontrado con el mes de junio más fresco de los últimos años.

Cada vez más, nos toca desplazarnos a países con ambiente desértico y temperaturas extremas, como Afganistán o Somalia. Y por eso elegimos el campo de maniobras de San Gregorio. Es lo más parecido que podíamos encontrar. Pensábamos que íbamos a tener temperaturas por encima de los 30 grados, pero el tiempo nos ha fallado un poco.

Con las últimas lluvias, tampoco han tenido todo el polvo que necesitaban.

Las tripulaciones estaban un poco preocupadas, porque lo que quieren es que haya bastante polvo para poder practicar la toma a ciegas. San Gregorio tiene unas condiciones ideales para ese tipo de tomas, que son la de más riesgo. De hecho, llega un momento en que cuando estás muy cerca del suelo, se forma semejante nube que tienes que pasar a instrumental. Y al no ver nada, el piloto tiene que ejercitar más su destreza.

Siempre hemos oído que los helicópteros civiles no pueden volar de noche, pero los militares sí que lo hacen. Imagino que arriesgan bastante.

La preparación de nuestros pilotos ha mejorado mucho. Antes, se obtenía el título básico en tres meses, pero no incluía el curso de instrumental ni el de vuelo nocturno. Te los tenías que sacar después en las unidades a las que te destinaban, y había gente que nunca lo lograba. Ahora, todos tienen que tener esa preparación, y quien no termina esa fase no sale piloto del Ejército de Tierra. Podrá ser piloto de helicóptero, pero no de combate. La tecnología también ha avanzado mucho, y las gafas de visión nocturna son ahora bastante mejores. En este ejercicio, todos los países participantes nos han pedido poder volar de noche.

Cuatro militares españoles murieron el pasado mes de abril en Haití al caerse el helicóptero en el que regresaban de la República Dominicana. El accidente de un Cougar en Afganistán también se saldó con 17 fallecidos. ¿No son demasiado peligrosos estos aparatos?

Yo creo que todo tiene peligro, pero no creo que el del helicóptero sea mayor. Lógicamente, cuando las condiciones son malas, en un ambiente desértico, a una baja altitud y encima recibiendo disparos, el riesgo se multiplica. Pero, como ocurre con los aviones, las revisiones que se hacen son muy minuciosas.

¿No será que nuestros helicópteros se han quedado viejos?

Yo creo que España ha hecho un esfuerzo muy importante. Entramos en el programa del Tigre, en el que solo están cuatro países. Tenemos ya seis aparatos, pero tendremos hasta 24. También hemos entrado en el programa del modelo NH-90, y se recibirán 45 helicópteros. Insisto, se ha hecho un esfuerzo por modernizar el material y por mejorar la seguridad de nuestras tropas.

En Aragón se nos quedó una espina clavada, no poder fabricar el Tigre, que 'voló' a la tierra de Bono, el entonces ministro de Defensa.

Yo ahí no puedo entrar. Lo conozco por la prensa. Pero creo que lo importante es que España entrara en el montaje y la fabricación de este helicóptero.