Descuentos de hasta el 70% en los escaparates para intentar salvar la temporada

Aunque las rebajas en el pequeño comercio no arrancan hasta mañana, este año los descuentos se han adelantado. De los escaparates de muchos establecimientos cuelgan sugerentes porcentajes desde la semana pasada. Es un intento, casi a la desesperada, de atraer a compradores y salvar así una temporada a la que la crisis y un tiempo más que inestable no han ayudado demasiado.

Desde la Federación de Empresarios de Comercios y Servicios de Zaragoza (ECOS) aseguran que no existen datos para medir cómo de mala ha sido la primavera. Sin embargo, las cifras no son necesarias para hacer una valoración a grandes rasgos. "Ha sido una temporada floja", explica el secretario general de ECOS, Vicente Gracia. "Que tantos establecimientos opten por hacer los descuentos que se están viendo estos días es un síntoma de que durante la primavera no se ha vendido lo esperado", explica.

Los culpables están claros. La más que señalada crisis y un tiempo que ha acompañado poco. "Como consecuencia los comercios más afectados son aquellos dedicados al equipamiento personal: ropa, calzado y complementos", señala Gracia. "Por otro lado, es el ámbito que se ve más beneficiado por las rebajas", añade.

"A nosotras marzo y abril nos fue bastante bien, pero no sabemos por qué en mayo se paralizó todo", explica Carolina Berdascas, una de las tres socias de la tienda de moda Zsa Zsa Zsú. Berdascas apunta a la economía como culpable. "Nosotras vendemos primera y segunda mano. Y las ventas han bajado en el primer caso. La segunda mano sigue teniendo salida porque es más económica, y eso es lo que la gente busca", añade. "Aun con todo muchas personas entran, miran, dicen que les gusta mucho, pero no compran", añade su compañera Almudena.

Una experiencia similar han tenido las dependientas de Minobay, que estos días oferta descuentos especiales de hasta el 70% en sus trajes de fiesta. "En esta tienda siempre hemos hecho muchas ofertas y no nos han faltado clientes. Pero ahora la cosa está más difícil. Cuesta más vender porque la gente se lo piensa", comenta Teresa Franco. Su compañera Merche se muestra preocupada por la situación: "Ahora estamos con muy buenos descuentos y luego llegarán las rebajas, no sé qué más se va a tener que hacer".

"Las ventas han bajado mucho. Entre unos que no tienen dinero y otros que tienen miedo", comenta Silvia Aurrecoechea propietaria de Zazpi. La situación le ha llevado a reconvertir su negocio. Hasta ahora se dedicaba principalmente a la venta de ropa. "Pero a partir de septiembre queremos enfocarla más a los complementos", explica. Por eso, Silvia ha aprovechado estos días previos a las rebajas y ha hecho descuentos del 35% sobre la ropa de temporada. "Por el cambio queremos quitarnos el stock cuanto antes", señala.

Elvira Sanchís también ha colgado el cartel de ofertas especiales en el escaparate de su tienda Mina. "Hago un 10% en todo menos en fiesta. Es una manera de cuidar a las clientas", afirma. Y es que tal y como está la situación, cada uno busca la estrategia que más le conviene para salir adelante.