Valdejalón estrena agentes para mediar con los temporeros en la campaña

La campaña agrícola ha propiciado una iniciativa pionera en la Comunidad, la creación de la figura del agente de convivencia en Valdejalón, una de las seis comarcas frutícolas. El propio nombre resume su cometido: mediar entre la Administración, los ciudadanos y los inmigrantes que durante estos meses buscan un empleo como temporeros, así como prevenir posibles conflictos o situaciones de desamparo.

Esta experiencia piloto se integra en el proyecto 'Una imagen vale más con mil palabras', subvencionado por el Ministerio de Trabajo e Inmigración. Una vez se difundió la solicitud de dos plazas por los municipios de la comarca, se efectuó un proceso de selección de los aspirantes. Los elegidos han resultado ser una persona de origen magrebí y otra de nacionalidad rumana, que ejercen su cargo desde el miércoles.

Su procedencia no es casual, ya que el plan se dirige principalmente a estos colectivos de extranjeros, los más numerosos en la recogida de fruta. Los requisitos necesarios para optar al puesto de agente de convivencia eran: saber leer y escribir en español y tener un segundo idioma (con árabe o rumano como preferencias, si bien se valoraba también el inglés y el francés); conocer la cultura árabe y/o rumana y poseer un carné de conducir válido en España y un vehículo.

Jesús María Isla, presidente comarcal y alcalde de Calatorao, añadió que se quería contratar a personas con arraigo en la zona de Valdejalón y que tuvieran en cuenta sus particularidades. El objetivo de la Administración pasa por establecer un flujo de comunicación continuo con sectores de inmigrantes reacios a acudir a los Servicios Sociales o a los que no les llega el mensaje de que pueden pedir ayuda si la requieren. "También es posible transmitirles los problemas que en ocasiones causan a la ciudadanía", añadió Isla. Es más sencillo que esta 'misión' arroje resultados positivos si se establece un vínculo con gente de su misma nacionalidad e idiosincrasia. Y cabe resaltar la ventaja de que la relación se desarrolla a través de canales oficiales.

Una vez concluya el análisis del campo de trabajo, los agentes vestirán con una ropa que incluirá su función y el logotipo de la comarca. Isla subrayó que los dos empleados que abogan por la convivencia actúan en coordinación con los Servicios Sociales allá donde haya una problemática o cuando lo demanden los ayuntamientos. En principio, se prevé que se muevan sobre todo en Ricla, La Almunia, Calatorao y Lumpiaque.

Los sindicatos alabaron la propuesta. Antonio Ranera, responsable de Migraciones de UGT, apuntó que se suma a un conjunto de medidas encaminadas a normalizar las campañas. Y Marta Arjol, secretaria de Política Social de CC. OO., dijo que contribuirán a la cohesión social en el territorio. Consideró que es comparable con la mediación intercultural que se lleva a cabo en Zaragoza.