LAS OBRAS CAMBIARÁN DE CALZADA

En la segunda quincena de julio se reabrirá Gran Vía

La circulación volverá a pasar por el eje donde se acometen en la actualidad los trabajos, pero en dirección hacia la salida de la ciudad.

El Ayuntamiento de Zaragoza desveló ayer por fin las modificaciones que se aplicarán al tráfico en la segunda fase de las obras del tranvía. El elemento más destacado es la apertura del paseo de la Gran Vía en la segunda mitad del mes de julio, después de siete meses y medio cerrado a cal y canto a la circulación rodada. Eso sí, con solo un carril por sentido porque el otro estará ocupado por las vías del tranvía.


En ese momento estarán concluidos los trabajos de la plataforma en los dos sentidos de circulación, aunque continuará la urbanización del entorno. Además de la apertura de Gran Vía, también en la segunda quincena de julio se procederá a abrir el paso en la calzada del eje de Fernando el Católico, Isabel la Católica y Vía Ibérica, que hoy está cerrada por obras. En ese momento se clausurará la calzada contraria para ejecutar la plataforma tranviaria.


Se invierte el sentido del tráfico


No obstante, el sentido de la circulación se mantendrá como hasta ahora, hacia la salida de la ciudad. Esto significa que la calzada que hasta ahora estaba cerrada por obras invertirá su sentido 'natural'. Los vehículos circularán por los carriles más próximos al hospital Miguel Servet en dirección al sur de Zaragoza.


Según explicó el Ayuntamiento de Zaragoza, los autobuses transitarán por las calles de Baltasar Gracián y Arzobispo Apaolaza, el itinerario alternativo que se establecerá el próximo 21 de junio con motivo del inicio de las obras de la estación de Goya. El Consistorio informó de que los ajustes del tráfico rodado, así como la fecha, se anunciarán con el tiempo suficiente.


Fuentes municipales añadieron que la previsión es que a lo largo del último trimestre del año estén concluidas todas las obras de la plataforma tranviaria, así como la urbanización del sector. Será entonces cuando empiece la fase de pruebas en el trazado, que se podría prolongar hasta tres meses. De este modo, se cumplirá el compromiso de que el inicio del servicio comercial de la primera línea de tranvía se produzca en marzo o abril del próximo año, antes de las elecciones municipales y autonómicas tal y como desean el gobierno del Ayuntamiento de Zaragoza y la DGA.