TRANSPORTE

Zaragoza subvenciona más a Ryanair que los aeropuertos en los que sí tiene base de aviones

Compromete 17,4 millones en cinco años para garantizar ocho rutas mientras que en los otros cinco aeródromos se ofertan entre 30 y 63 destinos. La ayuda media a los vuelos de la ciudad cuadruplica, como mínimo, a la más alta, la de Reus.

Un avión de Ryanair en el aeropuerto de Zaragoza
Zaragoza subvenciona más a Ryanair que los aeropuertos en los que sí tiene base de aviones
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Más por menos. Así se pueden resumir las subvenciones pactadas con Ryanair para mantener sus vuelos en Zaragoza hasta 2014 si se comparan con las de los aeropuertos españoles en los que sí tiene una base de operaciones. Ninguno de ellos ha pactado tanto dinero, especialmente si se tiene en cuenta el número de destinos que ofrecerá la aerolínea en la capital aragonesa (ocho) con los de Gerona, Reus, Alicante, Málaga y Madrid, que en el peor de los casos cuadruplican la oferta. E incluso en dos ciudades, Alicante y Madrid, la compañía no recibe ayudas públicas.

Como informó este diario, el acuerdo aprobado por la sociedad promotora del aeropuerto con la aerolínea irlandesa a finales de abril le garantiza el cobro de 17,4 millones de euros de subvenciones mediante publicidad durante cinco años sin comprometer siquiera una fecha para su base de operaciones ni nuevas rutas en el aeropuerto de Zaragoza. Ryanair únicamente garantiza el mantenimiento de las ocho rutas ya conocidas y a "realizar los mejores esfuerzos para mantener" un tráfico anual de no menos de 270.000 viajeros.

Las ayudas pactadas suponen un desembolso de 3 millones este año que aumentará a 3,6 en los próximos cuatro años, por lo que cada uno de los destinos costará de promedio 435.000 euros por ejercicio a las arcas públicas (la promotora está constituida a partes iguales por la DGA y el Ayuntamiento). Según los cálculos de la propiedad sociedad pública, cada viajero que utilice los nuevos destinos anunciados con París, Málaga y Düsseldorf implicará un desembolso de 30 euros, aunque la media de los 8 destinos rondará los 11 euros si se cumplen las previsiones de ocupación de la compañía.

Reus y Gerona pagan al año a la aerolínea de bajo coste 3,5 millones de euros, la misma cantidad que Zaragoza, con la diferencia que sus viajeros pueden enlazar con 30 y 63 destinos, respectivamente, al disponer de una base de operaciones. Por tanto, el coste de las rutas zaragozana es, en el peor de los casos, cuatro veces mayor.

El hecho de que varios aviones 'duerman' en los aeródromos con base implica un mayor número de vuelos, algo a lo que aspiraba Zaragoza y que en el acuerdo con Ryanair queda condicionado a su voluntad. Y hasta con limitaciones: sería solo un avión, ampliable a un segundo, en función de la demanda. Su base española con menos aviones es la de Reus, donde tiene destinados tres Boeing.

El último convenio negociado por Ryanair, a parte del de Zaragoza, lo cerró a principios de año con las instituciones catalanas para mantener y aumentar las rutas desde Reus. La compañía arrancó más dinero, 750.000 euros adicionales al año, a lo largo del periodo 2010-2013, lo que le garantiza cobrar 3,5 millones en cada ejercicio. Es el mismo dinero que desembolsará de media la promotora del aeropuerto de Zaragoza, aunque sin admitir una mínima comparación de servicio en ambos aeropuertos.

La misma cantidad recibe de la administraciones catalanas por sus operaciones en Gerona, aunque el prorrateo hace que la subvención por ruta se reduzca a poco más de 55.000 euros anuales.

La comparación aún es más odiosa con el resto de aeropuertos que cuentan con base de operaciones en España. El Patronato de Turismo de la Costa del Sol aportó 200.000 euros a Ryanair en 2009, según consta en documentación oficial del organismo, por lo que el apoyo público se reduce a 4.444 euros por ruta aérea (teniendo en cuenta los 45 destinos previstos para este año). De hecho, la aportación global a las distintas compañías y campañas publicitarias sumaron 500.000 euros en 2009, poco más de lo que destina Zaragoza a la compañía de bajo coste.

En el caso de Alicante y Madrid, la aerolínea irlandesa opera a riesgo y ventura, sin subvenciones, gracias al mercado turístico que concentra. En Altet llegan nueve millones de viajeros y la mitad proceden del Reino Unido, por lo que el filón de usuarios es importante para la compañía. Y algo similar pasa en Barajas, el principal complejo del país. La última ayuda de la que hay constancia en Madrid corresponde a 2008 y fue desembolsada por la empresa municipal Promoción Madrid, 80.290 euros.