Tercer Milenio

En colaboración con ITA

YAK-42

"Esperamos que el forense que examine al general Navarro haga bien su trabajo"

Las familias de las víctimas del Yak-42 aguardan a que el juez decida si lo manda a prisión.

Que la Justicia sea justa y que el forense haga bien su trabajo. Eso es lo que han pedido los familiares de los militares fallecidos en el accidente de Yak-42, a los que ayer se comunicó de forma oficial que el fiscal Antonio Burgos ha pedido que el general Vicente Navarro no entre en prisión. La Audiencia Nacional lo condenó a tres años de cárcel por las falsedades cometidas en la identificación de las víctimas. Sin embargo, el ministerio público entiende que el grave problema de salud del sentenciado, que tiene cáncer de pulmón, desaconseja la ejecución de la pena.

"Esperamos que el médico forense que examine al general Navarro y tenga que confirmar su enfermedad haga bien su trabajo", señaló ayer el presidente de la asociación de víctimas, Miguel Ángel Sencianes. "Las familias de los 62 hubiéramos querido que la humanidad y la conciencia también hubiera llegado a los nuestros -añadió-, que hubiera habido medios seguros en sus viajes, y que se les hubiera enterrado con la dignidad y el respeto necesario".

Los familiares de los militares que perdieron la vida en el accidente de Turquía -del que el próximo 26 de mayo se cumplirá el séptimo aniversario- reconocen que no van a olvidar el calvario sufrido durante estos años. "Nunca olvidaremos las declaraciones del mal llamado general en sede judicial diciendo que le pudieron bailar algunos números, refiriéndose a las bolsas con los cuerpos de los militares", dice Sencianes.

En cualquier caso, entre o no en prisión, las familias dicen que a Navarro le juzgará su conciencia. "Cada día, los 62 vendrán a reclamarle una a una todas las lágrimas derramadas por su familias".