NUBE VOLCÁNICA

Otros 19 aeropuertos afectados en el norte de España

Más de medio millar de vuelos fueron cancelados y la actividad seguirá suspendida hasta hoy por la mañana en los aeródromos de Galicia.

Un total de 518 de los 1.114 vuelos programados ayer fueron cancelados en los 19 aeropuertos de la red de AENA que tuvieron que cerrar por la llegada de la nube de ceniza del volcán islandés Eyjafjalla, en los que se preveía reanudar la actividad entre las ocho de la tarde de ayer y la mañana de hoy. Los de Galicia serán los últimos en retomar la normalidad.

La clausura de las instalaciones españolas se inició en la noche del viernes en los aeropuertos del noroeste del país (Santiago de Compostela, La Coruña, Vigo, Asturias, Santander, Burgos, León, Valladolid y Salamanca).

Ante el desplazamiento de las cenizas hacia el este, a mediodía se cerraron también los aeropuertos de Bilbao, San Sebastián, Vitoria, Zaragoza, Huesca, Pamplona y Logroño y desde las 15.30 los de Barcelona, Gerona y Sabadell.

También quedó fuera de servicio el aeropuerto de Lérida, pero no está gestionado por el ente público, con lo que son 20 los aeropuertos fuera de servicio en toda España.

Eurocontrol, el organismo europeo que coordina el tráfico aéreo, calculaba que a partir de la medianoche la nube de ceniza se iba a alejar de España y comenzaría a extenderse por el espacio aéreo francés.

La contaminación afectó también a las rutas habituales de los vuelos entre América y Europa y Asia, que se desplazaron hacia el sur para evitar las zonas afectadas en el Atlántico Norte. "Estos vuelos están procediendo por rutas en el centro y sur de la península, en los ejes Cáceres/Barcelona y Sevilla/Palma", informó AENA.

A consecuencia del cierre de los aeropuertos, Iberia canceló 106 vuelos y fletó decenas de autobuses para que los pasajeros afectados pudieran llegar a sus destinos por carretera, lo mismo que Air Europa, que anuló más de una veintena de rutas y tuvo que desviar otras tres.

Spanair preveía anular 39 trayectos y Easyjet, al menos las seis rutas con las que diariamente enlaza Madrid y Lisboa.

En el aeropuerto de Barajas se registraron a lo largo de la jornada largas colas de viajeros ante los mostradores de las compañías para obtener otro pasaje, el reembolso del billete o una plaza en un autobús. La mayoría de los afectados aceptó "con resignación" la cancelación del vuelo, aunque hubo algunas protestas por la "escasez" de personal y por la "organización de la salida de los autobuses".