ZARAGOZA

El Centro Cívico de San José lleva nueve días a 12 grados por un fallo en la caldera

El edificio, en el que trabajan 20 personas y por el que pasan 500 vecinos al día, ha cerrado su centro de tiempo libre y su ludoteca por un percance que se espera solucionar hoy.

Dos oficiales se calientan con un calefactor en la recepción del centro cívico.
El Centro Cívico de San José lleva nueve días a 12 grados por un fallo en la caldera
oliver duch

Los trabajadores y usuarios del Centro Cívico Teodoro Sánchez Punter, ubicado en la plaza Mayor de San José, están sufriendo con crudeza el frío de estos días. No solo en la calle, como todo el mundo, sino también en el interior de este edificio. Desde el martes de la semana pasada están sin calefacción y con temperaturas que no alcanzan los 12 grados, un problema que se repite año tras año por culpa de una caldera que falla habitualmente.

 

En este centro cívico trabajan una veintena de personas, entre la directora, la auxiliar, los oficiales, los trabajadores municipales y los miembros de la junta municipal. Además, todos los días pasan entre 500 y 600 personas para participar en las diferentes actividades que se ofertan o para aprovechar sus instalaciones. Estos días, tanto unos como otros no se despojan del abrigo y, algunos de ellos, ni de la bufanda en el interior del centro.

 

Como pudo comprobar ayer este periódico con un termómetro de precisión, la temperatura en la planta baja no llega a los 12 grados. En la planta superior se concentra más el calor y se alcanzan los 13,5 grados. Tanto en un caso como en otro están lejos de alcanzar los 17 grados que estipula la ley como el mínimo en los centros de trabajo en interiores.

 

El intenso frío ha motivado que se haya decidido no abrir estos días ni el centro de tiempo libre ni la ludoteca del centro, dirigidos a niños de 6-12 años y de 3-6 años, respectivamente. El pasado domingo por la mañana, como no había actividades programadas, permanecieron cerradas las puertas de todo el edificio. Además, un cartel en la puerta informa a los usuarios de la avería y de que no se puede garantizar "el buen uso y disfrute de las instalaciones". El salón de actos y la sala de conferencias

cuentan con un sistema propio de calefacción, por lo que estos días se desarrollan actividades con normalidad.

 

A pesar de que el aviso de la avería se dio el mismo día en que se produjo -el martes de la semana pasada-, no fue hasta ayer cuando acudieron los técnicos de la empresa que puso la caldera. Esta instalación es de las pocas de su tipo que hay en Zaragoza, y funciona con un gas que ya no se usa. Los operarios que trabajaban ayer en su reparación estimaron que hoy por la tarde podría volver a funcionar. Sin embargo, usuarios y trabajadores temen que se vuelva a averiar en unos meses.