MATRIMONIOS CIVILES

"Estás tan nervioso que no reparas en el escenario"

Radiantes los protagonistas y no menos brillante el marco. Tres parejas estrenaron ayer el pabellón de ceremonias del Parque del Agua, en una agradable mañana en la que la ofrenda de huevos a las hermanas Clarisas surtió su efecto.


Jonathan García Soriano, zaragozano de 32 años, y Desirée Angelie Leal, venezolana de 25, se dieron el 'sí quiero', rodeados de familiares, amigos y de la mucha vegetación que decora las nuevas instalaciones. "Dimos los papeles en junio del año pasado y pensábamos que nos citarían para el verano, pero nos dieron fecha para el pasado 16 de diciembre. Nos pareció demasiado precipitado y pudimos retrasarlo hasta hoy", explicaba Leal, poco antes de formalizar su compromiso. "Es una sorpresa y una casualidad que nos toque inaugurar las instalaciones, pero lo importante el día de la boda es la ilusión, la emoción, el estar con la familia, y no tanto el lugar en el que te cases por mucho que este sea bonito o esté de estreno".


El 'convite', al que asistieron unos 50 invitados, se celebró en las nuevas instalaciones que cuentan con 800 metros cuadrados edificados (en una parcela de 2.000), así como con cinco salas interiores que pueden unirse y separarse mediante tabiques móviles. El pabellón alberga también una terraza con vistas al jardín botánico y a los lagos, y se inserta en un idílico entorno en el que la profusa vegetación aún está por florecer. Lo que sí estaba ayer a flor -pero de piel- eran los nervios de los novios, aunque, según confesaba Leal, "llega un momento en el que estás tan cansado de tanto estrés que hasta bajas la guardia". La entonces prometida contaba que casi se le había olvidado encargar el ramo de novia y que, como su vestido era más veraniego, había tenido que improvisar comprando un abrigo y otros zapatos.


Para romper el hielo y que la tensión remitiera, el concejal de Protocolo, Luis Alberto Laguna, bromeó con los familiares e, incluso, leyó un poema mientras oficiaba la ceremonia. Laguna confía en que este nuevo equipamiento sirva para descongestionar la lista de espera de bodas civiles que existía en el Consistorio zaragozano.