ZARAGOZA

El coche-vigía de la Policía Local detecta 1.697 infracciones en tan solo dos meses

Hasta el 31 de diciembre han enviado avisos a los conductores y no se ha traducido en multas. Desde el 1 enero ya se sanciona.

Interior de uno de los coches-vigía de la Policía Local
El coche-vigía de la Policía Local detecta 1.697 infracciones en tan solo dos meses
HERALDO

El coche-vigía de la Policía Local de Zaragoza hace una semana que ya patrulla por las calles de la ciudad. Durante poco más de dos meses -exactamente 65 días- los agentes encargados de su manejo han estado familiarizándose con el equipo informático con el que está dotado y ajustando esta nueva herramienta de trabajo de la que disponen para perseguir a los infractores.

 

Este periodo de tiempo ha servido también para concienciar a los ciudadanos, sobre todo a los 1.697 que han sido sorprendidos in fraganti, bien aparcados en doble fila, en carriles de bus o en circunstancias que entorpecían la circulación. Todos ellos han recibido una notificación en la que se les avisaba de que habían cometido una infracción, pero en ningún caso se ha traducido en multa. Sin embargo, desde el pasado 1 de enero, las notificaciones serán ya sanciones, una vez verificadas en la Oficina de Tráfico.

 

Fuentes municipales explicaron que el ámbito de actuación de estos dos vehículos que están a cargo de la Unidad de Motoristas han sido las principales vías de la ciudad y, sobre todo, los ejes de las obras del tranvía, puesto que un aparcamiento indebido en estas zonas tiene una repercusión inmediata en la fluidez del tráfico.

 

El objetivo de estos coches-vigías -popularmente conocidos en otras ciudades como 'multacar'- no es un afán recaudatorio sino lograr modificar los malos hábitos ciudadanos y mejorar la seguridad vial y mejor movilidad, recuerdan desde el Consistorio. Añaden que se está trabajando en la línea de la fiscalía, que considera que los comportamientos insolidarios que causan problemas al resto de los conductores o crean situaciones de riesgo deben tener un reproche social.

 

El aparcamiento incorrecto en Zaragoza se castiga con hasta 90 euros (siempre que no sea grave, ya que entonces el importe puede ser de 300 euros).

 

Además de perseguir a los reincidentes de las dobles filas, el sistema informático que lleva incorporado el vehículo permite a los agentes descubrir los coches sustraídos, los que tienen las matrículas dobladas, los precintados (y luego puestos en circulación por conductores sancionados por haber cometido infracciones), los que no tienen pasada la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) o los que carecen de seguro.

Iguales que el resto

Los coches-vigía no se distinguen en nada del resto de los que utiliza la Policía Local en Zaragoza salvo por su dotación. Dentro lleva dos cámaras situadas tras el espejo retrovisor y un ordenador instalado en el asiento del copiloto. Fuera, una línea de rayos infrarrojos delante del puente que lleva las luces de emergencia permite captar las imágenes independientemente de las condiciones de luz que haya en el momento de registrar la infracción.

 

El ordenador del coche está conectado a diferentes bases de datos -matrículas de coches denunciados como robados, o que no han pasado la ITV, los que no tienen seguro o los que acumulan sanciones pendientes-. Así, cuando patrulla por las calles las cámaras van captando las diferentes matrículas y detecta inmediatamente las irregulares. En cuanto a las dobles filas, los agentes deben validarlas antes de cursarlas como denuncias por infracción.