Francisca Goñi está a punto de estrenar casa. A partir de mediados de noviembre, va a poder subir y bajar en ascensor, el agua del grifo va a salir caliente gracias a un sistema de placas solares y, cuando pasee por su calle, va a contemplar una bonita fachada. Sin embargo, Francisca no va a tener que hacer mudanza. Vive y seguirá viviendo en un piso del grupo Girón, en el barrio de Las Fuentes. Este conjunto de vivienda social, construido en 1957, ha sido reformado gracias al convenio de Áreas de Rehabilitación Integrada firmado por el Ayuntamiento de Zaragoza, el Gobierno de Aragón y el Ministerio de Vivienda.

"Estamos muy contentos. Hemos vivido dentro del edificio durante toda la obra, pero ahora podemos decir que todo ha estado bien empleado", comenta Francisca. No es para menos. A esta casa, en la que viven 40 familias, le han quitado unos cuantos años de encima y la han equiparado a los parámetros de calidad y condiciones de vida del siglo XXI.

Las mejoras acometidas han sido muchas. En algunas, ha primado la comodidad: se han instalado ascensores por la parte exterior, se han enterrado las redes de servicios, y se han reconstruido las escaleras y los patios. La seguridad ha sido otro de los factores a tener en cuenta con la incorporación de medidas contra incendios y la revisión de la cimentación, la estructura y el retejado del edificio. Pero tampoco se han olvidado de otros aspectos, como la estética o la sostenibilidad. En este último sentido, se han instalado placas solares.

A pocos días de que la obra de la manzana ubicada en las calles de Amistad, 1-3-5 y de Girón, 8 finalice, esta recibió ayer la visita del alcalde de la ciudad, Juan Alberto Belloch, y del consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes del Gobierno de Aragón, Alfonso Vicente. Ambos demostraron el afecto que le tienen a este proyecto, que mejorará la vida de muchas personas mayores que viven en estas casas. Además, Belloch calificó la actuación de "esencial", ya que no solo afecta a la fachada, sino también a la renovación de las instalaciones y servicios, y argumentó que este es "el modelo de cómo hay que hacer las cosas".

El presupuesto de intervención en cada una de las viviendas asciende a 44.008 euros. Pero, según explicó el alcalde, el 70%, es decir, 30.508 euros, ha sido aportado por las administraciones públicas, mientras que la parte restante, 13.500 euros, corre a cargo de los propietarios.

Otras actuaciones

El del grupo Girón es tan solo el proyecto piloto de un acuerdo firmado en 2006 entre las tres administraciones (Ministerio de Vivienda, Gobierno de Aragón y Ayuntamiento) para crear dos Áreas de Rehabilitación Integrada (ARI) con el objetivo de reformar 1.055 viviendas en 99 edificios.

Estas se localizan en dos zonas fundamentales: el Casco Histórico, donde se realizarán 383 intervenciones, y los Conjuntos Urbanos de Interés, que concentrarán 673 intervenciones. Estas últimas se llevarán a cabo en edificaciones de la posguerra situadas en los barrios de Las Fuentes, Delicias, San José, Picarral y el Rabal. En cuanto al Casco Histórico, la actuación se centra principalmente en las zonas de San Pablo y la Magdalena.

Con el proyecto piloto a punto de finalizar, ya se ha iniciado el proceso de rehabilitación de 696 viviendas, lo que representa el 67% del total previsto. De ellas, 360 se han realizado en el Casco Histórico y 336, en el resto de las zonas ARI. Además, se han iniciado los procesos para llegar a acuerdos con comunidades de propietarios para otras 326 actuaciones. De esta manera, se pretende que a final de 2010, se alcancen las 1.055 viviendas.

Además, el alcalde destacó ayer la conveniencia de "trasladar esta iniciativa a todas las casas sindicales y asimiladas" unas 8.000 en Zaragoza, y abogó por renovar el convenio para seguir con estas políticas de rehabilitación.