COMARCAS

Comienza la restauración de la cúpula de la colegiata del Santo Sepulcro

En los últimos días de agosto emprendieron un viaje migratorio a lugares más cálidos las cigüeñas que ocupaban la cúpula de la colegiata del Santo Sepulcro de Calatayud. Por eso, una vez retirados los nidos, ahora pueden comenzar las obras de restauración, que se retrasaron debido a la existencia de estas aves.

 

Las cigüeñas están protegidas y tanto la retirada de los nidos como su traslado debe ser autorizada por el Inaga. La empresa Cabbsa, adjudicataria de las obras, solicitó un primer permiso. Pero este caducó porque la dirección de la obra desestimó su colocación en la torre de la iglesia por el peso que suponía para esa parte del edificio. Las cigüeñas pusieron sus huevos y hubo que esperar a que las más jóvenes pudieran volar.

Con los nidos vacíos se ha vuelto a tramitar la solicitud para moverlos y empezar los trabajos. "Cuando esté acabada la rehabilitación se instalarán donde nos defina la dirección de obra, para que la próxima temporada, cuando vuelvan las cigüeñas, los encuentren en el mismo sitio", señaló Agustín Fernández, delegado de Cabbsa en Aragón.

 

En los últimos días se ha montado en el interior de la iglesia un andamio para salir a la cúpula. Las celebraciones religiosas se han trasladado a una capilla anexa.

 

A la restauración de esta parte de la iglesia se destinará un presupuesto de 146.592 euros y se espera que finalice en febrero o marzo. "El problema es que entramos en una temporada difícil porque el tiempo ideal para acabar en el exterior ya se ha pasado", afirmó Fernández. Por medio de una grúa instalada en la calle se bajarán los escombros y se subirán los materiales de reposición. Un andamio cubrirá la cúpula, se sustituirán las tejas y se restaurarán las vidrieras.