INFRAESTRUCTURAS

La llegada de agua de Yesa a los municipios del entorno de Zaragoza se retrasa quince días

Cuarte, Cadrete, María de Huerva y Cabañas disfrutan ya de los caudales del Pirineo, pero otras 19 localidades todavía no

De las localidades que tenían previsto recibir agua de Yesa la semana pasada, Cuarte, Cadrete, María de Huerva y Cabañas tienen ya agua de toda calidad para su consumo. Si el resto no dispone aún de este suministro, se debe a que la sociedad estatal Aguas de la Cuenca del Ebro (Acuaebro) está encontrando más dificultades de las esperadas en la limpieza de la red de tuberías construida para acceder al suministro de Yesa.

 

"El tema va bastante retrasado -reconocía ayer Alfredo Zaldívar, alcalde de Remolinos y presidente de la comarca de la Ribera Alta-. Pese a los esfuerzos de Acuaebro, el agua no sale limpia todavía. En los cuatro o cinco años que llevan hechas las tuberías ha habido alguna avería, se ha metido barro y, como no ha corrido el agua, ahora cuesta bastante limpiarlo. Hoy (por ayer) están trabajando en Remolinos, y en cuanto llegue allí el agua limpia, se podrá dar suministro a todo el ramal. Parece ser que a principios de la semana que viene volverán a hacer pruebas".

 

Ese ramal, el R-2, es el que abastece a Pedrola, Cabañas, Alcalá, Luceni, Boquiñeni, Pradilla y Remolinos. Como Cabañas la recibe directamente de Pedrola, se ha podido limpiar el tramo con rapidez. "Creo que en estas localidades el agua llegará ya perfecta a mediados de agosto -señalaba Alfredo Zaldívar- y el resto podría estar a fin de mes".

 

Cuando dentro de unos días se acabe la limpieza del R-2, se empezará la del R-3 (Grisén, Figueruelas, Alagón, Torres de Berrellén, Pinseque, La Joyosa y Sobradiel) y posteriormente la del R-1 (Novillas y Gallur).

"Una fiesta por todo lo alto"

Cuarte, Cadrete y María de Huerva, que tienen otra conducción, disfrutan ya del caudal del Pirineo. "El agua está espléndida y estupenda -subrayaba ayer Jesús Pérez, alcalde de Cuarte-. Tenemos ya el 100 por ciento de agua de Yesa y el pueblo está contentísimo. El agua es mejor que muchas de las que venden embotelladas. Tenemos que hacer aún algún pequeño ajuste, alguna modificación en el sistema potabilizador, pero la verdad es que el cambio es tremendo".

 

Nicolás Medrano, primer edil de Cabañas, se mostraba ayer feliz por lo que considera "un acontecimiento".

 

"Nos llegaba un agua mala de solemnidad, y aquí tenemos motivo ahora para hacer una fiesta por todo lo alto. Es verdad que durante algún día ha salido un poquito turbia, pero siempre menos que la del río. Ahora sale agua estupenda. Yo ya la bebo del grifo".

 

Además de las citadas, otras cuatro poblaciones, El Burgo, Fuentes, Pastriz y La Puebla de Alfindén, también recibirán caudales del Pirineo. Al estar conectadas a la red de Zaragoza, la recibirán mezclada al 50 por ciento.

 

Miguel Ángel Girón, alcalde de El Burgo, aseguraba ayer estar pendiente de resolver un mero trámite. "Mañana (por hoy) intentaré tener respuesta de Acuaebro; si la tenemos, el lunes mismo podemos empezar a ofrecer agua de calidad, porque todo está listo y a punto. Lo único que nos queda es clorar un poco el agua que llegue, nada más".

 

En el caso de La Puebla y Pastriz, el problema radica, según aseguraba ayer la alcaldesa de esta última localidad, Yolanda Ortas, en que "falta la conexión con Malpica, y se empezará la próxima semana".

 

Según Zaldívar, todos los municipios se encuentran esperanzados ante lo que considera que va a ser "una nueva etapa".

 

"Mucha gente no se imagina lo que nos supone esto -afirmaba-. Es un momento histórico para nuestros municipios, porque llevamos treinta años con un agua asquerosa. Aunque a algunos vecinos les pueda resultar un poco frustrante el que se retrase la llegada del agua buena, creo que lo importante es esperar hasta que estemos en condiciones de asegurar que va a llegar limpia. Si hemos estado treinta años así, esperar quince días más o menos no debe suponer ningún problema".

 

Cada consistorio podrá decidir qué porcentaje de su suministro se renueva con caudales de Yesa, aunque las localidades más grandes ya han anunciado que quieren toda el agua de calidad que puedan. Los convenios con Acuaebro fijan el mismo precio por metro cúbico, 0,082 euros, establecido para la capital. Con esa cantidad se cubren los gastos de mantenimiento de la tubería, pero no los de amortización de las distintas infraestructuras construidas, que empezarán a abonarse cuando entre en servicio el embalse de Yesa, a partir de 2015. Esa será la 'factura' que habrá que pagar, algo que no temen los municipios . Según Alfredo Zaldívar, alcalde de Remolinos, "subir el recibo del agua siempre es una medida muy impopular pero, en este caso, creo que los vecinos la recibirán bien. Casi nos cuesta más barato un metro cúbico de agua de Yesa que cinco litros de agua mineral".