ZARAGOZA

La contaminación por partículas en el aire supera los máximos permitidos

Los habitantes de Zaragoza soportan niveles de partículas en suspensión superiores a los valores límite establecidos en la legislación española para la protección de la salud humana. Según los datos que proporciona el Ayuntamiento, recopilados por Ecologistas en Acción, el año pasado las cinco estaciones de control de la calidad del aire que midieron este parámetro superaron los umbrales máximos con valores que en algunos casos están muy por encima de lo permitido.


Las partículas que se encuentran suspendidas en el aire son un tipo de contaminación atmosférica que debe controlarse en virtud de lo establecido en el Real Decreto 1073/2002 sobre evaluación y gestión de la ca- lidad del aire. Se trata de sustancias sólidas o líquidas de distinto origen -polvo, polen, hollín, humo…- que, debido a su pequeño tamaño, resultan imperceptibles para el ojo humano. Se les denomina con las siglas PM10, ya que su diámetro es igual o inferior a las 10 micras, es decir, son 25 veces más finas que un cabello.


Su tamaño hace que las PM10 sean inhaladas por las personas y lleguen con facilidad al sistema respiratorio causando efectos adversos para la salud: tos, asma, agravamiento de otras enfermedades respiratorias…


Los principales focos de generación de estas partículas son el tráfico, la industria, las obras y las calefacciones domésticas. No obstante, también están presentes en el aire por causas naturales, ya que el viento arrastra todo tipo de sustancias. De hecho, las intrusiones de polvo sahariano son otro de los factores que suele disparar los niveles de PM10.


Los que dice la normativa


El Real Decreto 1073/2002 establece que a partir del 1 de enero de 2005 la cantidad de partículas en suspensión no debe superar los 40 microgramos por metro cúbico de aire como media anual. Además, también fija un límite diario de 50 microgramos que no debe rebasarse más de 35 días por año.


Según las estadísticas elaboradas por Ecologistas en Acción con datos del Consistorio zaragozano, en 2008 ese valor máximo anual (40 microgramos) se superó en cuatro de las cinco estaciones de medida que ofrecieron datos sobre partículas. Además, una de ellas, la de la avenida de Navarra, dejó muy atrás ese límite con una media de 65 microgramos.


Si lo que se analiza es el número de días en los que se superaron los 50 microgramos, el resultado es aún peor, ya que el año pasado las cinco estaciones con datos rebasaron el tope fijado legalmente (35). Especialmente llamativo vuelve a resultar el dato de la avenida de Navarra con 240 superaciones, aunque las otras estaciones también dejan atrás esa cifra máxima con creces: Las Fuentes (120), Picarral (117), Roger de Flor (92) y Renovales (53).


Los balances que la organización naturalista hace de 2006 y 2007 y la tendencia observada en la primera mitad de este 2009 son similares, por lo que Ecologistas en Acción exige medidas para reducir los niveles de PM10 en el área metropolitana de Zaragoza.


"Las cifras están disparadas incluso aunque descontemos las intrusiones del polvo del Sahara -denuncia uno de sus portavoces, Saturnino Barbé-. Se sabe que las partículas que proceden de los motores diésel o de las industrias dañan la salud, así que, ya que no podemos controlar la llegada de arena del desierto, debemos hacer todo lo posible por reducir las partículas de origen humano".


No hay presencia de metales


El director de la Agencia de Medio Ambiente y Sostenibilidad del Ayuntamiento, Javier Celma, admite el problema y dice que hay que mejorar los niveles de PM1O de la ciudad, aunque sostiene que los cálculos de Ecologistas en Acción tienen "algunos errores". También subraya que los análisis de partículas realizados por la DGA no han detectado metales en suspensión -lo que sería aún más nocivo- y destaca que la situación ha mejorado respecto a 2007.


"Las únicas tres estaciones de medida que están homologadas según las exigencias europeas son las del Picarral, Renovales y Roger de Flor -aclara este técnico municipal-. Las otras dos también proporcionan datos, pero en el caso de la avenida de Navarra hay que tener en cuenta que se trata de una estación que incumple todas las distancias y que recibe directamente las emisiones de los autobuses de una parada anexa".


Celma reconoce que esas tres estaciones homologadas también rebasaron en 2008 el número de superaciones del máximo diario permitido, pero asegura que su media anual no sobrepasó el límite legal. Además, recalca que el número de incumplimientos se redujo de forma notable respecto a 2007, algo que también reflejan los datos de Ecologistas en Acción.


"Si se miran las curvas de tendencia de la contaminación por partículas en Zaragoza, se ve que los picos coinciden claramente con las épocas en las que ha habido más obras en la ciudad -comenta el director de la Agencia de Medio Ambiente y Sostenibilidad-. En 2008 no hubo obras, se sacó mucho tráfico del centro gracias al Cuarto Cinturón y al puente del Milenio y además Tuzsa tuvo 12 millones de viajeros más que el año anterior: todo eso se ha notado en la reducción del nivel de PM10".


Celma recuerda, por último, que el Plan Intermodal del Transporte permitirá reducir las emisiones del tráfico un 30% y eso conllevará, a su vez, una reducción de la generación de partículas.


El área metropolitana de Zaragoza es una de las 132 zonas problemáticas incluidas por la Comisión Europea en una denuncia contra España y otros nueve estados miembro por incumplir en este capítulo las directivas comunitarias sobre calidad del aire.