ZARAGOZA

La grúa cada vez 'se queda' menos coches en el depósito municipal

Vehículos con síntomas claros de abandono, turismos retirados por la grúa de la vía pública por una infracción o incluso por decisión voluntaria del titular. Son algunas de las formas en las que un vehículo que hasta hace poco circulaba por las calles termina convertido en un bloque de chatarra.


"Hay veces que al conductor le sale más rentable comprarse uno nuevo que pagar las tasas de arrastre y estancia o tener que reparar un coche en mal estado", explica el subinspector de Policía Local del depósito municipal, Javier Garbajosa. Estos coches acaban en la 'fila cero' del depósito municipal para ser enviados al desguace. Sin embargo, cada vez son menos los titulares de vehículos que renuncian a su coche, una opción que no tiene ningún coste para el usuario. Concretamente, fueron 182 los ciudadanos que renunciaron a su turismo entre enero y mayo de este año. Cifra que contrasta con los 287 que lo hicieron en las mismas fechas del año pasado, lo que supone una caída del 36%.


¿Es la crisis la causante de que menos zaragozanos opten por desechar su coche antiguo y comprarse uno nuevo? Garbajosa prefiere no especular: "Puede haber otras razones, como por ejemplo, que cada vez tengamos un parque de coches más joven. Y además, hay que esperar a que termine el ejercicio de este año para ver si se mantiene esta bajada".


Servicio sencillo y gratuito


Cada vez más ciudadanos conocen este servicio, que da la oportunidad de deshacerse de su vehículo a coste cero sin preocuparse por los trámites burocráticos. "Solo tienen que llamar al depósito, decirnos la dirección y darnos la documentación y las llaves del vehículo. Nosotros lo recogemos y lo enviamos al Centro de Tratamiento Autorizado (el desguace), donde lo descontaminan y achatarran. Allí lo dan de baja en la Jefatura Provincial de Tráfico. Todo sin gasto alguno para el conductor", indica Garbajosa.


No ocurre lo mismo con los vehículos que entran al depósito por motivo de una infracción o por estar abandonados en la calle. Si dos meses y 15 días después de recibir la notificación de que su vehículo se encuentra en el depósito, el titular no responde, el vehículo pasa a tratarse como residuo sólido urbano y se lleva al desguace. Pero antes, el conductor puede renunciar a él. Eso no exime de pagar la denuncia que lleva aparejada su retirada de la vía pública, pero sí de las tasas, que por una semana en el depósito pueden suponer 251,25 euros (136 de arrastre y 115,25 de estancia). Las tasas de custodia empiezan a cobrarse a partir del tercer día.


"Procuramos dilatar al máximo los plazos, para evitar que la gente se lleve alguna sorpresa desagradable. Y hasta miramos si el vehículo ha pasado la ITV o tiene seguro. Son síntomas de que el coche está en uso", cuenta Garbajosa. Pese a todo, algún despistado hay. "Pero son excepciones", asegura. De hecho, tras la notificación de la Policía, el aviso se publica en el BOP para mayor seguridad. "El único problema viene cuando el conductor se ha cambiado el domicilio y no lo ha notificado a Tráfico, porque entonces las cartas no le llegan, y no todos miran el BOP", advierte.