MEDIO AMBIENTE

"Casetas ha de aprender a valorar y amar la balsa del Ojo del Cura"

Medio ambiente l Los vecinos y la alcaldía del barrio zaragozano organizaron ayer una fiesta para reivindicar la mejora del espacio natural. Ahora piden la anexión al humedal de la antigua fábrica de los Conde.

Los vecinos de Casetas quieren que la balsa del Ojo del Cura sea algo más que un simple humedal para convertirse en el gran parque natural del barrio zaragozano. Así lo manifestaron ayer en una fiesta reivindicativa donde hubo castañada, plantación de arbustos, animación musical con el grupo de gaiteros del barrio y un cuenta cuentos a cargo de Mario Cosculluela.


La balsa del Ojo del Cura, en la que brota un agua de alta salinidad, está rodeada de una carrizal que tapiza las orillas lo que la hace muy apta para la parada de aves migratorias. Cada año se establece una pequeña colonia de entre siete y diez parejas de cigüeñuelas que encuentran en este hábitat suficiente tranquilidad y condiciones para sacar adelante sus polluelos.


La fiesta, organizada por la asociación de vecinos y la alcaldía, sirvió para acercar a los ciudadanos hasta este paraje de importante valor paisajístico y medioambiental. "La mejor garantía para su protección y mejora es el reconocimiento de los vecinos de su patrimonio. Casetas tiene que aprender a valorar y amar esta balsa", afirmó José Luis Almenara, de la asociación de vecinos.


El Ojo del Cura es uno de los pocos humedales que quedaron vivos hasta los años 60 del siglo pasado entre Casetas y Garrapinillos ya que, a partir de ese momento, se fueron drenando para dedicarlos a la agricultura y a la construcción de viviendas.


Desde comienzos de los 80, la asociación de vecinos y ANSAR se lanzaron a recuperar los humedales que habían sobrevivido. En concreto, el de Casetas, adquirido por el ayuntamiento en 2001, se había llegado a convertir en una escombrera y vertedero que, poco a poco, se ha ido adecentando.


Entre otras medidas, este año se han plantado 50 chopos en la parte más próxima a la autovía de Logroño para que, en el futuro, sirva como pantalla acústica y visual de este espacio natural.


"Ahora queremos que el Ayuntamiento compre las naves abandonadas de la antigua fábrica de Conde, con el objetivo de ampliar el parque y evitar el riesgo que supone para los chavales que allí van a jugar", reivindica Almenara.


Precisamente, en sus paredes se llevó a cabo ayer una demostración de grafitis a cargo de dos jóvenes de Casetas, Luis Manuel y Carlos Pérez, en la fachada de la vieja nave abandonada.


Pequeños y mayores acudieron en una mañana de domingo a reclamar un mejor trato para la balsa del Ojo del Cura, ubicada entre la variante de Casetas y el barrio zaragozano, que en este tiempo de otoño luce más color que nunca y está, de verda, "muy chula", dijo el alcalde, Roberto Polo.