Pintadas malsonantes, fuera de tono o racistas. Las Fuentes se ha vuelto a convertir en el foro improvisado de grupos neonazis o radicales que aprovechan las paredes de los edificios del barrio para lanzar mensajes xenófobos. El entorno del Centro Cívico de Salvador Allende y las calles de Tomás Higuera, Florentino Ballesteros, Miguel Servet... no se han librado de estos grafitis que lejos de ser una expresión de arte se asemejan más a una broma de mal gusto.

Los vecinos han alertado de la proliferación de estas pintadas desde hace algún tiempo. Esta semana la Policía de Barrio elaboró un informe fotográfico con las pintadas y ha remitido el caso a la Policía Nacional para que lo ponga en conocimiento de los grupos especiales de tribus urbanas.

La intención es que estos especialistas lleven a cabo las averiguaciones pertinentes. Asimismo, tal y como pidió la junta de distrito, se ha intensificado la vigilancia en el sector y se ha solicitado al servicio de Limpieza que se supriman de las paredes las expresiones racistas.

De momento, los residentes son testigos de estas pintadas que se extienden por el casco antiguo del barrio. Un grupo de vecinos ha denunciado su proliferación, con "esvásticas en color plateado" en papeleras, contenedores de papel, persianas de garajes, cabinas telefónicas e incluso negocios de inmigrantes.

"Este tipo de grafitis, al margen de hacer apología del odio y contra la convivencia pacífica en el barrio, suponen un claro atentado contra el mobiliario urbano que nadie sanciona y por supuesto nadie repara. ¿Es que somos un barrio de segunda?", se pregunta este grupo de residentes, que ha denunciado los hechos.

Indican algunas calles afectadas, como Camino Fillas, Florentino Ballesteros, Compromiso de Caspe, Batalla de Lepanto o Batalla de Pavia. Pero también aseguran que han aparecido pintadas, aunque algunas han sido ya borradas o tachadas, en la calle peatonal de entrada a la Casa de Juventud y Biblioteca del antiguo matadero, el parque lineal del Río Huerva y las entradas y alrededores de los colegios e institutos Santo Domingo de Silos (recientemente limpiada), Grande Covián, Marcos Frechin o Torre Ramona.

De hecho, los vecinos reconocen el miedo que tienen sobre todo por los últimos acontecimientos en los barrios de Torrero y el Actur (donde se han sucedido varias agresiones). La Asociación de Vecinos de Las Fuentes también está al tanto de este problema.

Esta es una zona muy sensible a este tipo de sucesos, ya que hace unos años el propietario de un establecimiento en Jorge Cocci, "El Negrito Zumbón", sufrió la persecución xenófoba con pintadas en su fachada durante tres años. Entonces, el dueño de este local lo denunció públicamente, pero finalmente se fue del barrio con su mujer.

Actuación del distrito

Ante la alarma social creada por esta situación, el presidente del distrito, Laureano Garín, intentó calmar los ánimos. Explicó que, a pesar de la preocupación inicial y lógica, "se puede asegurar que no existen grupos radicales fijos ni estables en Las Fuentes". Garín hizo hincapié en que la situación está controlada y que la Policía Local y Nacional está al tanto del problema. De hecho, agradeció la atención que mostraron los dos organismos desde el principio.

Recordó que se ha incrementado la vigilancia en horario nocturno. "Puesto que no se trata de actos vandálicos hay que actuar de manera diferente", especificó el presidente del distrito de Las Fuentes.

Normalmente, cuando se detectan grafitis sin ningún tipo de simbología o mensaje racista, es la propia junta de distrito la que ordena la retirada o se hace cargo de la limpieza. Aunque otras veces, son los servicios municipales los que se ocupan de eliminar las pintadas.

En total, hay doce equipos especiales distribuidos por toda la ciudad que trabajan en estas labores. Es necesaria agua a presión con arena fina en algunas ocasiones para conseguir eliminar estos dibujos.