Pocos gestos tan efectistas y teatrales como romper un papel ante las cámaras. Los ediles de ZEC del Ayuntamiento de Zaragoza se han acostumbrado a evidenciar su rebeldía subiendo vídeos a las redes sociales de rompe y rasga. Este lunes fue el concejal de Vivienda y Deportes, Pablo Híjar, el que desafió al Gobierno de Aragón diciendo que él no paga el Impuesto de Contaminación de Aguas (ICA) y rompiendo el recibo en mil pedazos. Híjar invita a la insumisión fiscal y caldea las relaciones entre ambas administraciones. En el Gobierno de Aragón dicen que la desleatad institucional es “inadmisible” y los tuiteros dicen a Híjar que ellos también van a romper el IBI y la plusvalía, a ver qué pasa. Eso, quienes no acusan al gobierno de ZEC de ser cómplice por pasar los datos del padrón a la DGA y que así pueda girar el nuevo impuesto.

Pero Híjar no ha sido del todo original. En su afán por mostrar desobediencia, se le adelantó su compañero de filas Alberto Cubero. El edil de ZEC y máximo dirigente del PCE-Aragón ya hizo trizas hace un año un requerimiento del Delegado del Gobierno que le obligaba a anular unas cláusulas contra los paraísos fiscales. Idéntico procedimiento: Cubero cogió el papel y, ante la cámara en su perfil de Facebook, hizo ris-ras e instó al delegado a llevarle a los tribunales.

Pero, ay, tampoco Cubero fue el primero en buscar así la polémica porque podríamos remontarnos al origen de los tiempos buscando ‘rompefotos’ y papeles. ¿Quién no recuerda a la cantante irlandesa Sinead O'Connor rompiendo fotos del papa Juan Pablo II allá por 1992? La estrategia la imitan los concejales de la CUP que acostumbran a romper imágenes del Rey en los plenos de Barcelona. Por cierto, que el último ‘rompimiento’ más mediático fue el del teniente de alcalde de Badalona, José Téllez, militante de Guanyem, que el 12 de octubre de 2016 destrozó el auto judicial que decía que el Consistorio debía permanecer cerrado con motivo de la fiesta nacional. Luego dijeron que lo que rompió fue una fotocopia, pero el gesto simbólico (y poco espontáneo) ahí estaba...